Asumió Coleoni y sentó sus bases. Fue presentado ayer por el Fondo de Inversión y el fideicomiso y ordenó concentrar desde hoy al plantel. El sábado será su debut ante Juventud Unida, en San Luis. Habría cinco cambios.

La leyenda era familiar para Gustavo Coleoni. “Bienvenido a tu casa Sapito”, decía un cartel. ¿Cuántas veces había soñado con cruzar el portón de la Boutique como DT de Talleres?

“Sueño cumplido”, dijo “el Sapito” y se mandó a las entrañas del estadio, ahí donde había dormido de pibe y a metros de donde papá y mamá atendían el buffet, cuando era la mascota del Talleres del 78 y soñaba con ser jugador.

Coleoni pisó las mismas baldosas de siempre, esta vez en compañía de su hijo Franco Giuliano (13 años y en las inferiores junto con su hermano Emanuel Iván, de 16) y, tras recibir las salutaciones de muchos hinchas , agrupaciones políticas y el beneplácito de la barra La Fiel, se prestó a la presentación al plantel.

Después de varias oportunidades en las que estuvo al alcance de la mano, al “Sapito” lo llamaron en condición de bombero para que conduzca al equipo al nonanogonal y lo ascienda directamente o por promoción.

Paradójicamente, Coleoni fue presentado por Ernesto Salum, accionista del Fondo de Inversión Albiazul, quien inicialmente impulsaba la llegada de Ricardo Caruso Lombardi.

Además estaba el fideicomisario Daniel Ruffener, miembro del ente que coadministra el club conjuntamente con los inversores albiazules.

Ambos grupos impulsaron la contratación siendo que el “Sapito” estaba en Central Norte, lo que disparó el enojo de sus directivos del club salteño que marcha segundo en la Zona 1.

Fue una ceremonia íntima en la que los jugadores aplaudieron a Héctor Chazarreta (volvió a ser el coordinador del semillero), quien condujo interinamente al primer equipo en el 0-2 con Sportivo Belgrano, tras el despido de Héctor Arzubialde.

La lluvia era torrencial y eso hizo que mucha gente se amontonara en los pasillos de la Boutique. Sin embargo, la voz de Coleoni se escuchó clarita, cuando habló con la prensa.

“Soy hincha del club. Hay que generar confianza en los jugadores. Tengo mucha confianza en que voy a sacar al equipo adelante”, comentó el flamante entrenador albiazul, quien será acompañado por Nicolás Lauría Calvo (ayudante de campo) y Ricardo Cassini (preparador físico).

Igualmente, cuando se le consultó por el objetivo del ascenso, el director técnico de Talleres puso el freno y dijo: ”Hay que saber separar la pasión de la razón. Prometer ascenso sería vender humo”.

La lluvia impidió que el plantel practicara en la cancha y en el predio, razón por la cual el plantel profesional hizo ejercicios en el gimnasio de la cancha y luego se trasladó al estadio Juan Pelatto para hacer ejercicios con pelota.

Marcó la cancha. Coleoni, como los jugadores se fue caminando al reducto cubierto y al paso formuló más declaraciones. “Acá voy en compañía de uno de mis hijos. También por eso vine acá. Este sueño es de mi familia también”, comentó Coleoni.

–¿Cómo viste al plantel?
–Están bien. He hablado con ellos grupalmente y mañana (por hoy) los voy a concentrar, para tener entrevistas personales con ellos. Quiero escucharlos y hablar con ellos. También vamos a empezar a charlar sobre el rival que es Juventud Unida Universitario de San Luis, el próximo sábado.

Coleoni marcó la cancha. No sólo porque decidió que habrá concentración para el plantel, sino también porque marcó pautas de actitud y de juego. “Todo jugada se inicia y termina con un gesto técnico, pero el que no corre, no juega. el que corre mucho va a jugar mucho”, afirmó el ex DT de Racing, Antoniana y Central Norte.

“Talleres se puede adaptar a todos los sistemas. Tiene meterial deportivo y humano. Quizá juguemos más vertical”, anticipó Coleoni, cuyo acuerdo sería similar al de Arzubialde.

El equipo. Quizá en el turno vespertino de hoy se produzca un anticipo del equipo que visitará a Juventud (SL), el próximo sábado a las 17. Coleoni volvería a la línea de cuatro (será un 4-4-2) y produciría los regresos de Walter Ribonetto, Cristian Zárate, Emiliano Gianunzio y Lisandro Sacripanti, quienes cumplieron con sus suspensiones. Seri se lesionó y no sería de la partida. ¿Irá Pieters?

Al DT le da igual: Dutari o Donatti. Gustavo Coleoni prestó consentimiento para el relevo de Juan Pablo Rezzónico, quien se rompió los ligamentos cruzados de la rodilla derecha ante Racing de Nueva Italia.

“La elección está entre Francisco Dutari y Alejandro Donatti. El entrenador no tiene problemas con ninguno. Veremos si pueden desvincularse de sus clubes. ¿Pablo Nieva? No lo vemos factible”, comentó Alberto Escalante, vicepresidente del Fondo de Inversión albiazul.

Dutari tiene contrato con Godoy Cruz, mientras que Donatti, está en Boca Unidos de Corrientes. Lo cierto es que la negociación se hará en breve.

Rezzónico viajarán hoy a Buenos Aires y se llegará hasta la AFA para certificar la lesión junto con el médico albiazul Julio Ferreyra.

De esta manera, el ente rector liberará el cupo extra para que Talleres pueda reforzarse, tal como ocurrió con Víctor Cejas, al inicio del torneo.