En un partido que defraudó por su chatura, Talleres y Belgrano empataron 0 a 0 ante 40 mil personas en el Estadio Córdoba. Dirigió muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

Frío. Pálido. Gélido. Desteñido. Pobre. Mezquino. Chato. Apretado. Seguramente si se apelara a las bondades del diccionario, el clásico tendría una montaña de calificativos en la misma sintonía. Con igual contundencia. En la misma dirección.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

De nuevo el partido más importante de nuestro fútbol estuvo más cerca del presagio que de la ilusión. Otra vez el miedo le ganó a la actitud, el mal gusto a la impronta, los recaudos al atrevimiento, la impotencia a la prolijidad, los temores al error a la necesidad de tomar riesgos para hacer la diferencia que los sacara de la mediocridad. Por eso Talleres y Belgrano empataron 0 a 0 en 90 minutos que en poco tiempo casi nadie recordará, dejando únicamente a salvo aquella famosa frase futbolera que a menudo enarbolan los técnicos y que expresa sesudamente que si no se puede ganar, es mejor no perder.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

Y en este caso Talleres y Belgrano entendieron que no es momento, a esta altura del campeonato, para andar perdiendo así porque sí. Por querer ganar con algún salto de calidad. O darle alguna satisfacción a los 40 mil hinchas que poblaban el Chateau en el caso del elenco de Comizzo, o a los miles que estaban sufriendo a través de las radios, en el caso del equipo celeste.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

Empataron con nada aunque a la hora de trazar el balance global, Belgrano fue un cachito más, jugó por momentos un poquito mejor y generó cuatro situaciones de gol, dos de ellas muy claras, que lo elevaron a la categoría de ganador moral aunque vale decir, que esa luz de distancia que sacó el conjunto de Gómez, no tuvo tampoco el resplandor que pudiera mejorar el brillo del partido. Empataron. No se sacaron ventajas. Olave y Brasca atajaron poco y solo el fútbol sabrá mensurar, cuánto le servirá este puntito a Talleres de local, apoyado por una multitud, en su lucha por salir de la zona del descenso y cuánto a Belgrano en su afán de pelear en serio una chance de ascenso si vive desaprovechando todos los guiños que le ha hecho el campeonato. Pero empataron y vale reiterar que Belgrano hizo un gasto mayor, en el juego y en las situaciones, y quizás mereció un poco más.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

La tarde comenzó con sorpresas. Gómez y un Belgrano más ofensivo en nombres (no se sabe si por convicción o por autoprotección) con Gigli y Bustos arriba y Suárez unos metros más atrás para el armado «Pirata». Comizzo y la inclusión de Facundo Reyes en lugar de Rosales, Quiroga por Viveros aunque con el correr de los minutos, el rendimiento de Talleres le agregaría confusión a su idea original. Nunca se supo que quiso hacer el técnico albiazul. Lo que sí evidenció el trámite del primer tiempo es que lo que imaginó, le salió mal. Porque Reyes nunca supo dónde pararse y Talleres jamás contó con la propiedad del balón.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

En este rubro, Belgrano empezó y terminó mejor. Lo fue a buscar a Brasca con alguna turbulencia en los metros finales pero firme en lo territorial. Seguros Lux y Lollo en la mitad, Farré en la izquierda atento con Bufarini y Aldecoa en la derecha con mucho más presencia y protagonismo que Quiroga, hasta terminar redondeando un buen primer tiempo.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

Entonces, en esa paridad «acelestada», Belgrano produjo tres llegadas claras sin haber encontrado aún a Suárez: un cabezazo de Turus que se fue cerca, un balazo de Gigli que Brasca contuvo en dos tiempos y un derechazo terrible de Bustos que reventó el travesaño.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

Como réplica Talleres llegó solamente una vez como consecuencia de la poca asistencia a la dupla Borghello-Cuevas y porque careció de juego más allá de Rimoldi y toda su categoría para tocar y tratar de asegurar el destino de la pelota: un remate cruzado le quedó a Reyes por izquierda con ángulo cerrado y su tiro fue bien controlado por Olave.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

En el complemento Talleres mejoró a partir de los ingresos de Rosales por un muy intrascendente Borghello y de Viveros como doble cinco, cuando el pibe Reyes claudicó físicamente por el trajín y los nervios. Recién ahí, Rimoldi tuvo alguien cerca para cuidar el balón y con eso el albiazul pudo plantear una discusión más equilibrada y un poquito más cerca de Olave, aunque sin profundidad ni situaciones claras de gol.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

Belgrano siguió recostado en las ganas de Aldecoa, la entrega de Lux y en lo que pudiera hacer Gigli en los últimos metros acompañando a Bustos, ante el abandono de un Suárez totalmente desconectado, con la cabeza a 10 mil kilómetros del clásico y obviamente del Chateau. En este parcial llegaron una vez cada uno. Quiroga tras una exquisita asistencia de Viveros resolviendo muy mal, con Cuevas listo para empujarla y Gigli, quien cabeceó donde estaba Brasca un centro perfecto de Suárez.muy bien Sergio Pezzota. Fue expulsado Valentín Brasca en el equipo albiazul.

Nada más. Eso fue todo. Eso fue nada. La imprudencia de Brasca y su tonta expulsión fue la secuencia sobresaliente de la parte final. Talleres y Belgrano volvieron a priorizar sus miedos, sus urgencias, sus necesidades, a la posibilidad de pegar ese salto de grandeza futbolística que la gente reclamaba. No perdieron, es cierto, pero las seis fechas que faltan dirán para qué les sirvió este puntito que se repartieron.

TALLERES 0 / 0 BELGRANO


Cambios: ST Rosales por Borghello (T), 9m. Viveros por Reyes (T), 35m. Silva por Buffarini (T) y Mansanelli por Aldecoa (B). Amonestados: Buffarini, Quiroga, Lussenhoff y Viveros (T); Aldecoa, Turus y Bustos (B).
Expulsado: ST: 34m. Brasca (T).
Cancha: Estadio Córdoba
Arbitro: Sergio Pezzotta.

TALLERES Uno por Uno


Valentín Brasca (3): Venía cumpliendo una sólida labor, recuperado luego de su noche negra contra Chacarita. Sin embargo, la agresión a Aldecoa, vista por todo el estadio, le tiró abajo el puntaje. Y se salvó del penal. Irresponsable.

Mauro Algecira (5): A diferencia de partidos anteriores, en los que se adelantó y fue importante como volante, se estacionó como lateral, ganó y perdió y en definitiva, aportó poco.

Gabriel Oyola (5): Por arriba ganó casi todo, por abajo «durmió» en un rechazo que derivó en Bustos y en su balazo en el travesaño.

Federico Lussenhoff (6): Por presencia y por determinación, el mejor de la defensa. Esta vez no pudo contagiar su ímpetu hacia arriba, como ocurrió en el gol de Rosales ante Almirante Brown.

Marcos Torsiglieri (5): En el primer tiempo muy firme en la marca, clausuró su sector. En el segundo, dio ventajas. Por arriba, igual que los zagueros, no ganó en el área celeste.

Julio Buffarini (4): La primera amarilla de la tarde fue para él y condicionó su juego tan exuberante. No pesó, al empeñarse en maniobras personales que exasperaron a propios y extraños.

Lucas Rimoldi (6): La única luz que iluminó el camino futbolístico de Talleres. Falló en varios pases, pero estuvo muy solo para el armado, incluso cuando entró Rosales.

Matías Quiroga (6): Tras un duelo parejo en el primer tiempo con Aldecoa, en el segundo prevaleció favorecido por el ingreso de Viveros. Tiro afuera una muy clara cuando Rosales y Cuevas esperaban en el área.

Facundo Reyes (4): El pibe jugó su primer partido como titular y lo abrumó el marco. No fue delantero (su puesto), y tampoco prosperó como enganche. Pidió salir por una lesión muscular.

Iván Borghello (3): Los clásicos de la primera rueda llevaron su nombre impreso en la red. En éste, los primeros 45 fueron de tal intrascendencia que no reingreso para el segundo.

Héctor Cuevas (5): Sólo voluntad. Abandonado a su suerte, no le llegó ni una redonda como para generar peligro. De todos modos, se nota que no está en su nivel.

Paulo Rosales (5): La gran sorpresa de la tarde fue su exclusión del equipo. Saltó a la cancha en el entretiempo y entusiasmó con un para de apariciones por derecha. Nada más.

Alexander Viveros (6): Parecía que entraba para ser volante izquierdo, pero se acomodó al medio, a la par de Rimoldi y desde allí metió un par de pelotas de gol. Interesante.

Anthony Silva: Atajó 10 minutos y no le tiraron ninguna al arco. Se complicó solo en un rechazo.