Por sus ambiciones siempre latientes, y sobre todo por sus urgencias, Talleres saldrá esta noche a conseguir un resultado positivo en la Ciudadela tucumana, tan hostil para los albiazules. Tendrá enfrente al líder del torneo, pero el equipo de Comizzo está obligado a un gesto de grandeza para salir del fondo. El gesto que le faltó en Rafaela ante un mínimo Ben Hur, y que podría aflorar hoy ante el equipo más sólido y rendidor de la temporada.

En primer lugar, Talleres debe ayudarse a sí mismo cosechando puntos de alta cotización a esta altura de los promedios. Pero además, lo que le reste a los tucumanos redundará en beneficio de Belgrano, que en el otro extremo de la tabla aguarda un traspié del «Santo» para descontar los 9 puntos de ventaja.

Por cierto que no sería un favor gratuito, porque si los albiazules frenan a San Martín, el «Pirata» enfrentará con otro ímpetu a Ferro, rival directo de Talleres en los promedios.

Ese mismo lunes, Instituto será anfitrión de Ben Hur, e intentará hundirlo más en la tabla del terror, para a su vez alejarse del peligro. Claro que un triunfo albirrojo se tomaría como una buena noticia en barrio Jardín, sea cual fuere el resultado de esta noche en Tucumán. En la medida de que el campeonato ingrese en su fase crucial, así de entrelazado puede estar el destino de los tres cordobeses.