Goles para la ilusión
Talleres superó 3-1 a Ben Hur y alcanzó, en forma provisoria, la línea de Belgrano y Godoy Cruz.
El desenlace del partido que tuvo como triunfador a Talleres sobre Ben Hur encontró al equipo albiazul en una posición que los hinchas valoraron a puro canto, anoche en el Chateau: la "T" también es puntero.
Las tres unidades le sirvieron a la "T" para alcanzar a Godoy Cruz y a Belgrano en lo más alto de la tabla de Primera B Nacional, aunque el Tomba y la "B" aún deben disputar sus respectivos partidos de la sexta fecha.
Más allá de que no terminará en la cima cuando el lunes concluya la fecha, la sola mención de que Talleres está mezclado en el lote que pelea por los ascensos traza un panorama impensado, si se tienen en cuenta los antecedentes cercanos.
¿Alguien imaginó esta situación después de la derrota 4-2 contra Platense en la primera fecha? ¿Y de lo que pasó hace apenas tres meses cuando cumplió la peor campaña de su historia, y eludió la reválida contando monedas?
De ilusiones siempre se vive. Más en el caso de los hinchas de Talleres. Pero hay que reconocer que hace bastante tiempo a la gente le cuesta horrores sostener el ánimo cuando los partidos pasan y el mensaje del equipo no alcanza para creer en objetivos elevados.
El triunfo contra Ben Hur se enmarca en ese escenario. Los tres goles, los tres puntos y la tercera victoria consecutiva como local constituyen un cóctel dulce, muy dulce, que los hinchas albiazules paladean por estas horas creyendo en que el Talleres protagonista es una posibilidad concreta.
Tras sacar un punto en su visita a Almagro (1-1), la tranquilidad llegó con los triunfos sobre Aldosivi (2-1) e Instituto (2-0). Y luego del tropiezo (2-1) con Independiente Rivadavia en Mendoza, anoche llegó la tercera victoria al hilo en el Chateau, lo que confirma que la "T" parece estar preparado para dar pelea en este maratónico certamen de 38 fechas.
Claro, lo del pueblo albiazul volvió a ser impactante. Anoche no hubo tribunas repletas, pero sí una presencia conmovedora:unas 20 mil almas sufrieron al comienzo y se entregaron a la euforia después, cuando el triunfo contra los rafaelinos ya estaba en el bolsillo.