Que no se corte
Con los mismos once jugadores que el último lunes terminaron con la racha de 20 partidos sin victorias, Talleres visita hoy a las 18.30 a Unión de Santa Fe, un duro escollo en su lucha por conservar la categoría.
Talleres buscará extender una semana triunfal visitando desde las 18.30 a Unión de Santa Fe, en la continuidad de la 16ª fecha del Torneo Clausura de la B Nacional. Es que el lunes pasado, precisamente en la provincia santafesina, aunque en la ciudad de Rafaela, el elenco de barrio Jardín, actuando de local, batió 5 a 3 a Villa Mitre de Bahía Blanca, rompiendo la peor racha de su historia, lueog veinte partidos sin victorias.
Y como la fórmula le dio resultado, el técnico Salvador Capitano optó por confirmar a los mismos once protagonistas que vienen de romper la racha negativa. A pesar de que Agustín Correa y Matías Quiroga presentaron inconvenientes físicos en el transcurso de la semana, ambos llegan a su plenitud física y están hoy desde el arranque. Lo que no fue confirmado por Capitano fue el banco de suplentes. Son 22 los futbolistas que concentran desde la semana pasada en Santa Fe, y ayer se sumó el arquero Leandro Requena, ya que Silvio Dulcich padece una contractura en su pierna derecha y quedó descartado para hoy.
Por su lado, Unión viene de superar a San Martín de San Juan por 1 a 0 (le rompió un invicto de 13 partidos al entrenador Fernando Quiroz) y se encuentra en la discusión del título. El Tatengue marcha cuarto en la tabla de posiciones, con 27 unidades, y una victoria lo reposicionaría cerca del líder Atlético de Rafaela, y bien ubicado en la tabla general. A raíz del buen rendimiento, el entrenador Carlos Trullet (padre del lateral derecho de Talleres) decidió al igual que Capitano no realizar variantes en su formación, por lo que el esquema de 4-3-1-2, con vocación ofensiva, será la estrategia táctica a usar por Unión.
En el encuentro del Apertura pasado, en el Estadio Córdoba, el resultado fue un 0 a 0 aburrido, que se caracterizó por la ausencia de público visitante. Una medida implementada por el Comité Ejecutivo de la AFA, a los fines de evitar la violencia, y en esa jornada solamente los socios pudieron presenciar el encuentro. Apenas tres mil hinchas fueron testigos de ese empate.