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Los jugadores albiazules fueron muy autocríticos por su presente en la temporada.

Los futbolistas albiazules saben que las palabras no están de más y en las últimas horas abundaron los diálogos para salir del pozo.

El momento histórico que vive Talleres es inesperado. Por tal motivo, la floja campaña que viene realizando el plantel que conduce Ricardo Gareca es analizada con mucha preocupación en el seno albiazul. «Las palabras no están de más, se sacan cosas positivas y somos muy autocríticos», dicen entre ellos en la intimidad.

En las últimas horas los diálogos entre los futbolistas de la «T» se repiten en un solo tema: «cómo salir de esta situación». Aunque, la gran mayoría sostiene que está faltando un «poco de suerte» en los últimos partidos.

«Es difícil la situación que estamos viviendo y también describirla. Nos hacemos cargo de la situación. Pero no tenemos que bajar los brazos», afirma el delantero Diego Ceballos, que además analiza: «Es feo acostumbrarse a perder. Nosotros damos todo para ganar, llegamos y no convertimos, y estamos pagando caro los errores».

¿Vergüenza?

Por su parte, el ídolo contemporáneo de los albiazules, Diego Héctor Garay, es más directo a la hora de analizar el presente: «Este momento es doloroso, comparto la desazón que tiene la gente y por eso me da un poco de vergüenza salir a la calle», dice el Diego cordobés.

El volante creativo sostuvo además: «Estamos mejorando, pero el no poder ganar nos tiene preocupados», y agregó en relación a la continuidad de Gareca que si el «Tigre» se quedó «es porque ve que hay un plantel que puede revertir la situación».

«Este es un equipo que a priori estaba armado para ser candidato, pero así es el fútbol. No se eligen las situaciones, hay que vivirlas. Estamos trabajando para salir de esto», manifestó Lautaro Trullet, el lateral que tiene una amplia trayectoria en la B Nacional, donde le tocó ascender, pelear ascenso, pero nunca vivió una situación similar a la que tiene actualmente la institución de barrio Jardín.

El cuerpo técnico está trabajando, buscando variantes. También entre nosotros nos apoyamos, porque este problema puede ser más en la cabeza que en lo futbolístico. Pero en los últimos partidos hemos demostrado que anímicamente estamos bien», concluyó Trullet.