Iban 43 minutos de juego cuando Juan Compagnucci le cometió penal a Damián Akerman. Antes de ordenar la ejecución, el árbitro Daniel Raffa advirtió a los jugadores de Talleres y de Ferro que no invadieran el área.

Carlos Castilla le dio fuerte, pero su remate fue detenido por Diego Pozo. Raffa, cuando todo Talleres festejaba, anuló la ejecución y ordenó repetirla. Advirtió que cuatro jugadores albiazules habían pisado el área antes de que Castilla rematara.

Ni lerdo no perezoso, el DT de Ferro, Oscar Garré, cambió el ejecutor y mandó a Damián Akerman, quien no tuvo problemas para vencer la resistencia del arquero albiazul.

Doble discurso. "Raffa nos dijo que repitió el penal porque hubo invasión de cuatro compañeros", reveló Pozo.

A la hora de las declaraciones, cuando terminó el primer tiempo, el referí ratificó lo que le dijo al cuidapalos de la "T", pero agregó:"Además, hubo un adelantamiento del arquero".

Advertido de su error, porque la imagen de la TVmostró que Pozo se tiró luego del remate de Castilla, el juez volvió sobre sus pasos y dijo: "Solo hubo invasión".