Talleres 2 - Defensa y Justicia 2


Eduardo Eschoyez / [email protected]
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Talleres igualó 2-2 contra Defensa y Justicia. El nivel de juego no fue bueno.

En un día cargado de emociones, por el fallecimiento de Amadeo Nuccetelli, la imagen futbolística de Talleres terminó sostenida con chinches, porque de tanto querer ganar al final quedó demasiado cerca de perder. Cosas que pasan: un equipo con limitaciones que no se mide a la hora de los riesgos, hace y deshace lo que tiene buscando la fórmula que le permita desarticular la defensa del que resiste. Pero de tanto insistir y corregir para volver a empezar, lo único que logra es potenciar su grado de exposición.

Quedó claro que Talleres quiso respetar su esencia de jugar por abajo. Siempre fue así. Ni aún en los peores momentos, en los que su identidad de respetar el pase y la circulación quedó contra la pared, Talleres abandonó la idea de ganarle la pulseada a Defensa y Justicia creyendo en la cosa pensada.

Claro, la realidad lo cacheteó sin anestesia. Salvo en los instantes posteriores al gol de Diego Ceballos en el primer tiempo (16 minutos) y de Víctor Píriz Alves en el complemento (19 minutos), Talleres nunca pudo sentirse ganador. No en el marcador, sino en la cancha, en el juego, en el debate, escenarios a los que debió trasladar su vocación de establecer diferencias.

Por eso, el empate 2-2 se construyó sobre los baches constantes de la "T" y la prolijidad de Defensa y Justicia, un equipo que podría haber ganado porque tuvo más cantidad y calidad de chances de gol.

La presencia de Vega le dio a Defensa una entidad que Talleres nunca tuvo. ¿Garay? Bien en el arranque, pero se diluyó en la medida en que no tuvo socios para descansar en el toque y la triangulación. Garay, como Talleres, imaginó un partido, pero terminó jugando otro.

La luz de alerta, posiblemente, tiene que ver con lo cerca que quedó la "T" de perder todo. Gareca se jugó todas las fichas, con varios jugadores aptos para armar y atacar, y Defensa, con Vega y alguito más, se le acercó varias veces y hasta le provocó varios sustos.