Juan Pablo Vojvoda, las virtudes y los defectos que encontrará en la "T", cuando empiece el 18 de junio.

Lo más importante
- El 18 del corriente, "Chufo" tendrá su primera práctica y una semana después se irá a Salta.
- El ADN del equipo, la posesión, la efectividad en los pases y una valla segura, fue el mejor legado de Kudelka.
- La falta de puntería y los rendimientos que bajaron en las partes decisivas son los puntos críticos.
- La base, los jugadores del club y los refuerzos que conformarán el nuevo plantel que peleará en tres frentes.
- El 10 de agosto será el debut por Superliga.

Ahora que el final fue feliz y que Talleres se clasificó a la Copa Libertadores, el presidente Andrés Fassi tomó la tabulada para trabajar sobre los defectos y sobre las virtudes que dejó el equipo que condujo Frank Kudelka y que ahora heredó Juan Vojvoda. Es indudable que la identidad de juego es el objetivo madre que hay que potenciar otra vez, ya que, de esa manera, llegó a estar segundo durante seis fechas de Boca, que fue el campeón.

¿Los déficits? Hay uno que lidera y es la falta de puntería que el equipo mostró en la primera Superliga y en el torneo anterior. Contando la derrota con Boca, el equipo logró cinco puntos de 21 y anotó seis goles. Su promedio fue de un gol cada cuatro situaciones. El gol de Guido Herrera de penal contra Olimpo valió, junto con una combinación de resultados, el pase a la Libertadores, tras 17 años. Pero en todo el torneo, Talleres concretó un 25 por ciento de lo que generó.

En el anterior, ni hablar. Talleres también estuvo comprendido en zona de copas y terminó afuera porque no pudo ganar en sus cuatro partidos finales. Temperley 1-2, Gimnasia LP 0-1 y empates con Rosario Central (3-3) y San Lorenzo (1-1). En estos últimos dejó escapar la victoria en los minutos finales en juego en los que llegó entre siete u ocho veces y duplicando al rival. Acá la efectividad fue de un 13 por ciento.

Veamos.

Virtudes

La identidad. Hubo que irse al Talleres de Saporiti para encontrar un equipo que supiera a qué jugar de verdad. Cuando fue de posesión, fue capaz de llegar al gol en 15 toques como el tanto de Junior Arias a Atlético Tucumán. Cuando decidió ser veloz y preciso, llegó a anotar en tres o cuatro toques. Fue un tributo al pase.

Posesión. El tridente de volantes volvió a ser clave como en el primer torneo. Se fue Gil, siguieron Guiñazú, "Bebelo" Reynoso más Fernando Godoy y, tras la venta del "10", surgió Juan Ramírez. Es el regulador de Talleres. La baja en el rendimiento de los compañeros del "Cholo" se dio al final. El equipo de Kudelka totalizó 18 recuperaciones por partido y se ubicó sexto. Boca fue el mejor con 23. La efectividad en pases fue del 83,4 por ciento (8.139 correctos sobre un total de 9.759). "El Cholo" fue el pasador top y segundo mejor recuperador del torneo, detrás de Wilmar Barrios (Boca).

"Le tuvieron miedo a la edad en la selección. Este viejito de 39 años dio pases cortos y más largos. No sentado en una silla", dijo Guiñazú.

Valla menos vencida (20 goles). Fue la mejor temporada del fondo albiazul y de su arquero Guido Herrera. De no ser por uno de los dos goles de Olimpo, habría sido absoluto y no compartido con San Lorenzo, cuyo arco también cayó 20 veces. Ese partido final, el "1" de Talleres convirtió de penal.

"Fue maravilloso ese gol. El premio fue para toda la defensa. Clasificamos a la Copa Libertadores", contó Guido Herrera.

Déficits

La efectividad del 25 por ciento. Los 33 goles que Talleres marcó (fue noveno contra los 50 del campeón Boca) duplicaron el 13 por ciento del torneo anterior y alcanzaron para la clasificación a la Copa Libertadores. Las ventas de Palacios, Menéndez y Reynoso parecieron no influir cuando la "T" llegó al puesto de escolta, tras el receso. Pero luego se sintieron en goles y manejo.

"Contra Boca no tuvimos posesión ni puntería", fue la autocrítica de Kudelka tras el juego de Boca.

Sin embargo, si la puntería hubiera sido mejor, el pase habría llegado antes y la presión sobre Boca no se habría terminado en ese partido. No por nada, sus goleadores terminaron con registros bajos para la pretensiones mencionadas. Arias hizo seis, y tanto Ramírez como Silva hicieron cinco, con la salvedad de que el uruguayo arrancó tras el receso veraniego.

El partido con Independiente fue una muestra cabal de la cantidad de goles que erró la "T". Talleres llegó seis veces y falló casi siempre.

Veamos algunos números de los avances de Talleres para poder entender qué deberá mejorar Vojvoda. El total de tiros al arco fue de 262: 33 se convirtieron en goles como ya quedó dicho, 93 fueron al arco, nueve dieron en el palo y 127 se perdieron. Esos tantos marcados representan un 12 por ciento de efectividad. El que más pateó fue River con 315 intentos y 37 goles, mientras que el de mejor rendimiento fue Goody Cruz con un 17 por ciento.

Pelota parada. De los 33 tantos anotados y sin contar los seis penales convertidos (tres fueron marrados), Talleres hizo un solo gol de pelota parada en la temporada. Fue el tiro libre de Lucas Olaza a Chacarita Juniors. En córners, Talleres ejecutó 157, de los cuales 73 fueron en el primer tiempo y 84, en el segundo. Sin conversiones.

Pases incorrectos. También crecieron cuando Talleres necesitaba ser más preciso.

"El plan B" que debe surgir. Kudelka siempre jugó a lo mismo y nunca tuvo un plan B. Jamás resignó la condición de ataque. Sus variantes solamente fueron estratégicas y de nombres, pero jamás de tácticas. Sin profundidad, sin la pelota y con el recambio debajo de las expectativas, en el tramo final, hizo de su Talleres una versión "previsible". Fue clásico ver cómo los rivales presionaban el rato inicial a Guiñazú o dejaban libre a Quintana, para que Talleres dividiera la pelota.

"Voy a morir con la mía", siempre dijo Kudelka y Talleres vivió gracias su plan.

Más juveniles que deben debutar. En un club que debe vender dos jugadores por receso, la cuota de juveniles de la casa en ese aspecto fue poca. En esta Superliga solamente debutó Cristian Ojeda. Catriel Sánchez y Nahuel Bustos, quienes tuvieron su estreno en el torneo anterior, no fueron tenidos en cuenta. O no hicieron mérito para ello. "El Tanque" se fue a Ucrania y Bustos fue bicampeón con la reserva.

Es lo que hay. Como Kudelka, tendrá que arreglarse con lo que haya. El DT albiazul siempre sacó un conejo de la galera. Pero quedó dicho que se quedó sin variantes al final del torneo, cuando más lo necesitaba. Vojvoda viene de un club con un presupuesto menor y también le dio identidad a su juego. Pero Defensa no es Talleres. Igual, necesitará a algunos de sus valores para que el resto interprete su idea. Ya está Andrés Cubas. ¿Llegarán Pochettino, Miranda y Martínez?

"Sé que Frank dejó la vara alta, y voy a trabajar para sostener ese nivel. Haré lo imposible para poder mejorarlo", aseguró Vojvoda.