Menéndez, con seis, y Palacios, con seis, son los goleadores de la “T”. Además, son muy afines afuera de la cancha.

Son rápidos y furiosos, habilidosos y gambeteadores, con impronta y cambio de ritmo; son jóvenes y amigos... pero sobre todo del gol y de cómo buscarse. Se trata de Jonathan “Joni” Menéndez (23 años) y Sebastián “el Chupa” Palacios (25), los goleadores del primer equipo albiazul con seis tantos cada uno, y quienes han comenzado a disfrutar del Mundo Talleres.

Sin ser especialistas, el romance con las redes empezó de verdad en aquel icónico 3-1 ante San Martín, en San Juan (el primer triunfo del torneo) y se acrecentó a medida que Talleres no pudo encontrar un goleador en Carlos Muñoz, Gonzalo Klusener, Eial Strahman y Okiki Afolabi, lo que motivó que tras el receso, el DT Frank Kudelka armara el tridente ofensivo con Victorio Ramis.

En aquel partido, jugado en el estadio verdinegro, Palacios anotó de penal el 1-0 parcial y fue la figura del juego, mientras que “Joni” marcó el tercero. Fueron los primeros tantos de ambos ya que el tanto a Racing se lo adjudicaron a Agustín Orion, en contra, y no al tucumano, que produjo el disparo que se le escurrió al arquero.

Fue el inicio de una serie que llegó a cinco triunfos consecutivos con gran participación de quienes se fueron haciendo amigos en la cancha y fuera de ella. En las buenas y en las malas. Cuando Menéndez sufrió su tercer des­garro en la pierna izquierda y que eso podía llevarlo a cirugía, fue de los que más lo alentó a continuar conjuntamente con Ian Escobar (vinieron juntos de Chacarita). Es más, también lo hizo público a través de publicaciones en Instagram.

Menéndez también se preocupó por Palacios cuando sufrió un siniestro vial con un ómnibus y ­luego por una lesión muscular que le impidió estar desde el inicio en el histórico 2-1 a Boca, en la Bombonera. Lo cierto es que superaron sus lesiones y surgieron como los goleadores de Talleres: tres del tucumano (dos a Unión, su exclub, y uno con Lanús) y tres de Menéndez (a Patronato de Paraná, Lanús y Belgrano).

En realidad, “el Tucu” podría haber sumado uno más, porque Esteban Andrada, arquero de Lanús, le atajó el penal a “Pala”. “Ahí lo reté porque lo vi bajoneado, después de que erró el penal. Después fue figura porque es un gran jugador”, supo decir Menéndez, mellizo de Nahuel, quien quedó jugando en Chacarita.

“Fue un partido muy importante el que le ganamos a Lanús. Le quitamos la pelota, pero golpeamos en los momentos justos”, señaló “Pala”.

Pase y gol

Los partidos ante Lanús y Belgrano consagraron la fórmula “pase de Palacios-gol de Menéndez” y viceversa. “Fue hermoso anotar un gol en el clásico”, dijo “Joni”, apenas salió del vestuario. Pero la sensación no era pura y exclusivamente por eso. Su gol representa haber vencido los miedos de una lesión repetida en el pie zurdo. El triple desgarro ocurrido en la pretemporada lo dejó “ahí” de ir al quirófano.

Después de una serie de interconsultas médicas se decidió esperar y “Joni” volvió con todo. Él manejaba los dos perfiles, pero en su regreso a las canchas se hizo temible usando el perfil derecha.

¿Más? Hace dos semanas, Pablo “Payito”Aimar sorprendió a todos con una comparación. “El jugador que más se me parece es Jonathan Menéndez, de Talleres. Me gusta cómo encara y va para adelante”, sorprendió el riocuartense. ¿Qué dijo “Joni”? “Me pone orgulloso. Pero en realidad... el más parecido es ‘Bebelo’ Reynoso. Está de más decirlo”, se sinceró el delantero.

Talleres tiene el 35 y 50 por ciento de las fichas respectivas de Menéndez y de Palacios. Y ya hay varios clubes interesados en llevarse a los “rapiditos” para la próxima temporada.

Como fuera, Talleres vive de los amigos... del gol.