Goleador. El jugador viene de convertir su primer tanto en Talleres y seduce quizás con alguno más que pueda venir. Y se banca los reproches.

Se equivoca y los murmullos bajan desde los cuatro costados, casi como pidiendo permiso. Toman dimensión ante una mala salida, y con el correr de las fechas se multiplican para terminar mutando en dudas. Las dudas se acercan al terreno de juego y con el roce de las gargantas de cada hincha albiazul, salen despedidos vestidos de insultos después de que a Talleres le convierten.

Jesús Nievas aparece por el segundo palo, cierra los ojos y empuja la pelota al encuentro con la red. Su primer gol en Talleres es un descargo. Un pedido de paciencia. Una invitación a confiar en un equipo que, hasta el momento, es el mejor de la competencia según mandan los números.

“Sinceramente, me tenía confianza. Había ganado 2 ó 3 veces en el área y sabía que me iba a quedar una más. La verdad que esperaba hacer un gol en Talleres en algún momento y me alegro que haya llegado”, tira Nievas a Día a Día, capitán en el último juego.

El defensor no esquiva los reproches que recaen sobre la última línea albiazul, pero, a diferencia del trato con los rivales, al hincha no le sale fuerte al cruce y prefiere el análisis: “Siempre están. Mientras mantengamos el cero, parece que la defensa está bien; si nos hacen un gol, parece que estamos mal. Pero en realidad hay que observar muchas cosas de los goles que nos hacen, o analizar porqué supuestamente no funciona la defensa, no hay que quedarse solo con el gol en contra”. De todas formas, reconoce que hay goles que son “responsabilidad nuestra, pero porque también nos equivocamos como cualquiera”.

Un tiro de gracia. La victoria de Talleres sobre Tiro Federal llegó tras dos fechas sin sumar de a tres y donde un manto de dudas comenzaba a apoyarse sobre el rendimiento del equipo. “Nosotros siempre estuvimos bien”, salta Nievas. “Lo que se diga afuera no nos importa, somos una gran familia que está confiada y consiguiendo resultados, por algo clasificamos tres fechas antes y estamos punteros”, explica el santafesino de 33 años, buscando llevar tranquilidad. “Se acerca una etapa decisiva y sabemos que el hincha se pone más impaciente porque no quiere repetir los fracasos de años anteriores, pero nosotros estamos tranquilos, sabemos lo que tenemos que hacer y lo estamos haciendo”.

Paciente, seguro, conciliador. El ex Almirante Brown no vende falsas ilusiones, pero tiene una esperanza ciega puesta sobre sus compañeros que lo empujar a ilusionarse. “Fue muy positivo que se haya mantenido un gran nivel contra Tiro, eso demuestra que los que no suman muchos minutos, están preparados para saltar a la cancha también. Todos luchamos por lo mismo y creo que se nota en la cancha”.

El futuro inmediato tendrá a Talleres afrontando 10 batallas que tienen reservado solo un lugar en la B Nacional. Nievas se asoma al reducido, y afirma: “Imagino partidos muchos más cerrados que hasta ahora. Donde el margen de error es mínimo y todos jueguen a la equivocación del rival o apuesten a la contra. Hay que estar preparados, no podemos fallar”.

A Jesús Nievas todavía le resuena el grito de gol en los oídos. Fue el primero, pero avisa: “En mi carrera, he hecho unos 5 goles por año, así que espero tener alguno guardado para lo que viene, que es lo importante”.

Nuevo. Jesús Nievas llegó a la T esta temporada desde Almirante Brown. Es uno de los más experimentados.