El artillero de Talleres, Sebastián Sáez, manifiesta que la presión por clasificar sigue, más allá de las dos alegrías consecutivas. “No nos tenemos que quedar con esto. Sería pecado”, acotó.

Por más que suena el teléfono, nunca va a ser atendido. Es que son las 16.25 y el timbre está en silencioso. Es en vano, inútil, esperar la utopía de que alguien conteste del otro lado del tubo. Imposible. Como todo santiagueño, la siesta es sagrada. “Todos los días, tres horas y media o cuatro de siesta. Es religión para mí”, cuenta el delantero de Talleres, Sebastián Sáez, a PODIO, cerca de las 18.30, una vez repuesto del extenso ritual de dormir en ese espacio entre el almuerzo y la merienda. En la previa del clásico ante Racing, rival al que el “Sacha” le anotó dos goles en la primera rueda (y uno más, dos temporadas atrás, en Nueva Italia), la paciencia lo carcome con demasiada naturalidad. “Estamos tranquilos, pero queremos justificar esta levantada de dos victorias consecutivas ante Racing. Sabemos que ante Alumni no hicimos el mejor partido, aunque lo importante es que recuperamos esa convicción y fuego para ir a buscar los resultados. Cada clásico es especial, los dos estamos necesitados”, profirió Sáez.

- Esta semana es crucial, con dos partidos en Córdoba...
- Sin dudas pero nosotros no usamos ese lema, vamos partido a partido. No podemos pensar en el cotejo ante Racing si ya tenemos en mente el duelo del domingo ante Central Córdoba. Nos está yendo mejor jugando cada partido como una final, sin importar el rival ni los demás resultados. Debemos conservar eso.

- ¿En qué mejoró Talleres?
- La autocrítica, las ganas de ganar, la decisión de ir a buscar cada partido, son varios de los ítems que fuimos dialogando. Este torneo es demasiado parejo, a lo largo del año no hicimos casi nada bien y sin embargo estamos ahí, a dos puntos de la clasificación. En el Argentino A, tranquilamente el último de la tabla le puede ganar al primero. Nunca bajamos los brazos, y eso que tuvimos bajones tremendos, porque hubo partidos que no merecimos ni perder ni empatar, y nos quedamos con el sabor agrio.

- ¿Cómo te imaginás el duelo ante Racing?
- Los enfrentamos dos veces, por la Copa Argentina y el torneo, ganamos las dos veces, pero no tenemos que confiar en las estadísticas. Es una realidad, en los clásicos no importa cómo uno llega, si ese día te levantás derecho, y estás concentrado, existen más garantías de ganar. Los dos partidos fueron durísimos, este no va a ser la excepción. Va a ser parejo, ellos no tienen a (Hernán) Fernández y eso es bueno para nosotros.

- Pese a la remontada, todavía falta...
- Por supuesto, no nos tenemos que quedar con esto. Sería pecado. Acá todos nos estamos jugando mucho y es cuestión de aprovechar el envión. Racing no viene bien, y va a querer levantarse anímicamente contra Talleres. Hay muchos factores. Estamos obligados a ganar, los dos equipos sienten la necesidad de sumar de a tres, así que seguramente se va a disputar una final, una batalla.

- Estás a dos goles del máximo artillero (Juan Aróstegui, con 13 tantos), ¿pensás en eso?
- No, yo vivo todo partido a partido, trato de abstraerme de todo eso. El delantero vive del gol pero no pierdo de vista que acá en Talleres el objetivo es grupal. No me genera presión tampoco. La meta es meternos en la clasificación y luchar por el ascenso. No podemos desviarnos, esa es la consigna y tenemos otro desafío mañana ante Racing. No hay que dejar pasar ninguna chance de sumar.

11 goles gritó Sebastián Sáez en Talleres: Libertad, Unión de Sunchales (4), Racing (2), Alumni, Central Norte, Sportivo Belgrano (SF) y Juventud Antoniana