El "Hacha"

(*) Luis “Hacha” Ludueña, ex futbolista de Talleres y la Selección.

Siempre imaginé que mis hijos serían futbolistas. De chicos, no me dejaron ni una sola maceta sana en el patio, me rompieron vidrios y puertas a pelotazos. Los vecinos se quejaban, pero era evidente que el fútbol era lo de ellos.

La verdad no me imaginaba este presente. Que los dos puedan vivir del fútbol, es algo impensado. Daniel tiene la pausa justa, sabe administrar el balón, mientras que Gonzalo cuenta con una pegada potente y mucha velocidad. No me quiero imaginar lo que podrían hacer juntos en un equipo.

Sin embargo, siempre dije que el mejor de todos es mi hijo mayor, Sebastián, porque tiene un panorama espectacular y mucha rapidez mental. No llegó a jugar por un conflicto personal, pero era un gran jugador.

Como padre tengo la satisfacción de que pudieron seguir mi camino, y son felices con esto. De mi parte, tenía el compromiso de apoyarlos, sin obligarlos, para que no bajaran los brazos, porque después iban a recoger los frutos. Siempre escucharon mis consejos, antes que a todos los que se les acercaban, y espero que haya sido de importancia mi aporte en su vida profesional.

Para mis hijos no tengo otra palabra que agradecimiento. Daniel me ayudó a pagar la hipoteca de la casa, cuando las deudas eran muchas y no tenía cómo hacerle frente. Es el mejor gesto que recibí, por eso hace dos años y medio que no tomo alcohol. Gonzalo siempre está para dar una mano con su familia, y con los nietos también (Joel, de 12 años) y Juan Gabriel (10), que juegan en San Lorenzo, en la Liga Cordobesa.

Espero que algún día jueguen en Talleres. Pero que no vengan a robar, como dice la gente, sino que aporten lo suyo para pelear un campeonato. Y otra cosa que sueño es que puedan hacer lo que yo no hice: retirarse en San Lorenzo, aunque sea un partido de despedida, por todo lo que nuestro equipito del alma nos dio. Me siento orgulloso de los hijos que tengo.