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Pacheco, delantero de Escuela, busca dominar la pelota ante Peñaloza. La "T" y Escuela no se sacaron diferencias. Foto: LaVoz / Sergio Cejas.

Ante el líder Escuela y con dos jugadores menos, Talleres se las arregló para empatar 1 a 1.

Dos gestos muy marcados dejó el 1-1 con el que finalizó Escuela Presidente Roca, único puntero, y Talleres, en uno de los juegos destacados de la 13ª fecha del Campeonato de Primera A "Centenario del Club Universitario", disputada ayer en su totalidad.

En los rostros de uno, alegría, conformidad y tranquilidad, tras haber logrado conseguir un punto con nueve jugadores, en cancha de su rival (donde ofició de local) y nada menos que ante el puntero. Esos eran de Talleres.

En los otros, de Escuela, nervios, fastidio e impotencia por no asegurar tres puntos vitales para seguir su marcha ascendente al título y no tener que sufrir el acoso de sus perseguidores.

El poder de la tarjeta. No es en este caso la de crédito sino la roja. La misma que vieron dos jugadores de Talleres en el segundo tiempo (17m y 25m) y que rompieron los libretos de ambos hasta el pitazo final.

Hasta entonces, principalmente en la primera mitad, tanto Talleres, de local en Escuela, como "el Panza Negra", apostaron a la pelota contra el piso, la circulación y la aceleración final. Fue en esa etapa que llegaron los goles, que dicho sea de paso, bastantes parecidos en su concepción. El primero de la "T" llegó por Godoy quien, tras una guapeada que arrancó en su campo, encontró en Franceschi la descarga justa en el área rival para poner el 1-0.

Pero 5m después (a los 36), le tocó a Rezzónico llevarse la pelota desde su terreno, tocar con Pacheco dentro del área, para que éste asista a Flores para el 1-1.

Pero no todo sería lo mismo en el complemento. Uno, con más gente, apurado, impreciso, se quedó sin ideas; el otro, aguerrido, agigantado, se dispuso no perder y así le salió. Por eso, en el reparto, el que sonrió fue la "T".