Ambiente distendido y clima de camaradería caracterizaron ayer al plantel de Talleres, que se entrenó en el country El Bosque, que el club La Tablada posee en Villa Warcalde. Roberto Saporiti ordenó múltiples trabajos con balón y un "picado" en una de las canchas de rugby. Así los jugadores continuaron con la etapa de "ablande" previa al debut en el Apertura de la Primera B Nacional.
Mauro Algecira ayer defendió uno de los arcos (el otro fue Gonzalo Bustamante, de buena labor), pero su función es la de volante central y, si nada raro ocurre, estaría en el debut contra Defensa y Justicia.
"Estoy muy contento con el grupo y me estoy poniendo a punto para ganarme un lugar. Nos falta un poco más de partidos para ir sincronizando los movimientos. Estamos un poquito duros con la pelota, es algo lógico, pero calculo que para el primer partido vamos a estar bien", dijo Algecira, quien cumplió 26 años el pasado martes.
Sobre su función como "doble 5", el ex Vélez y Almagro explicó: "Yo tengo un poquito más de libertad y 'Ema' (Giménez) se queda un poco, pero eso no quita que él pueda salir. De a poco nos iremos conociendo así como con el resto del equipo. Hay que hacer lo imposible para que Talleres esté lo más arriba posible".
Para Mauro, que nació en Bell Ville, jugar en Córdoba es especial. "De chico tenía deseos de venir a Córdoba, pero en su momento no salió la posibilidad, me fui a Buenos Aires y quedé en Vélez. Estoy muy contento de estar en Talleres porque tengo cerca a mi familia", concluyó.
En materia de refuerzos, se habrían enfriado las chances del volante Marcelo Penta. Para anoche u hoy se esperaba el regreso del gerenciador Carlos Granero para que se ocupe de ese tema y de las inhibiciones.