La pretemporada en Mar del Plata sirvió para que Roberto Saporiti forjara a su Talleres modelo 2006/'07, el que ayer hizo su primera práctica en Córdoba.

Y ayer, "el Sapo", que se retrasó algunos minutos por el tráfico que había en la ruta, aprovechó para explicar los motivos de la conformación de un plantel nuevo, de los 12 jugadores incorporados, de los regresos, de las 18 partidas y de las críticas recibidas de varios de los que se fueron. "Mi apuesta es conformar un buen equipo, que juegue bien y que consiga resultados", planteó el entrenador, más allá de que ya reconoció que sigue soñando con el ascenso.

"Falta un delantero y un volante zurdo, aunque allí el titular será Cristian Ríos. Dentro del presupuesto de Talleres, armé el equipo", dijo el DT.

-El presupuesto es más bajo que del torneo anterior...

-No. Que había más nombres de Primera División. Es una opinión. Yo preguntaría por qué ese equipo estaba a tres puntos de irse al Argentino A.

Y a continuación, el DT ingresó a un tema polémico: algunas incorporaciones que habrían sido consensuadas con los gerenciadores y las críticas que recibió de Oyola y Zárate, quienes se quedaron dolidos porque Saporiti no les informó en tiempo y en forma que no seguirían.
"Elegí a todos. Quienes se fueron, lo hicieron por una decisión deportiva. O bien porque tenían otras propuestas y de pronto querían aguardar hasta una semana antes y no podía esperarlos", explicó el entrenador.
Saporiti se explayó sobre ese tema: "A los jugadores que eran del club se les mandó el telegrama y a los que estaban a préstamo, la mayoría, eran dueños de su vida. No tenía que informarles nada. Ni ellos a mí si estaban en tratativas con otros clubes. Me reuní con Granero y le dije quienes se iban y ahí estaba Zárate. Si después alguien no le informó... Pero cuando Zárate quiera puede venir a hablar conmigo, pero a las cosas no las digo en público".
Por último, el DT también explicó la situación de Oyola y Argüello: "¿Oyola? No sé. De pronto hubo un jugador que se le mandó el telegrama y faltó 17 días. Y a la decisión de Argüello, no la compartí con Granero".