No va a ser sencillo que Martín Cabrera siga en Talleres. Ateliers ya anunció que su préstamo vence el 31 de diciembre, pero desde la dirigencia de Quilmes, ayer se anticipó que, más allá de que hoy no es un tema prioritario, el jugador debe regresar. Y, además, Estudiantes de Río Cuarto reclama la propiedad del volante.
“Acá se está reacomodando todo. Volvió a ser presidente José Luis Meizner y hay que ver qué técnico reemplaza a Osvaldo Sosa, quien le bajó el pulgar. Ahora puede tener chances, nos gusta. ¿Por qué puede volver? Porque tiene una cláusula para rescindir a mitad de año”, contó un directivo cervecero.
Igualmente a Talleres le cabe la chance de intentar renovar el préstamo o bien pagar los 300 mil dólares que vale la opción por el 80 por ciento del pase.
Pero más allá de Talleres y Quilmes también habría un tercer club en discordia: Estudiantes de Río Cuarto. ¿Qué tiene que ver? El club del Imperio del Sur le reclama al “cervecero” el pase del volante. Es más, en el expediente de la quiebra albiazul figura una carta documento en la que Estudiantes advertía a la T de una supuesta irregularidad, en enero pasado, cuando se incorporó el volante.
“Cabrera es nuestro y ya demandamos a Quilmes. Lo formamos, lo prestamos a la CAI y de golpe lo dejaron libre con el argumento de que un jugador no puede volver a ser amateur después de haber sido profesional. No sé en qué va a terminar esto. Pero vamos a luchar para recuperar al jugador. Si eso ocurre, Talleres deberá negociar con nosotros”, dijo Jorge Artundo, titular de Estudiantes. “¿Qué pienso de Cabrera? El jugador se presentó en Agremiados para obtener su libertad de acción. Luego, se incorporó a Quilmes”, agregó el directivo.
Otra revocatoria
Carlos Tale, el juez de la quiebra albiazul, sigue revocando los contratos de cesión de jugadores con los que el empresario Jorge Petrone debía cobrarse aportes a la última comisión.
Mediante la sentencia 633, el magistrado dispuso la nulidad y revocatoria de los derechos económicos sobre Valentín Brasca, Darío Arlotta y Martín Godoy (10 por ciento, de los tres futbolistas que Gustavo Mascardi se llevó a Ferro cuando lo gerenció) y la totalidad de los pases de los juveniles Mariano Gómez, Diego Torres y Marcelo Sarmiento. Además Petrone perdió los derechos sobre 10 pibes más que debía elegir en el semillero.