Los cambios van camino al fracaso
Por Gustavo Veiga
Buenos Aires. Es difícil determinar si existen razones políticas subalternas, pero el proyecto fogoneado por un par de presidentes (Enrique Merelas, de El Porvenir, y José Lemme, de Defensa y Justicia), para modificar la estructura de la B Nacional, va camino al fracaso. Al menos, por la vía que ambos plantean.
El asesor letrado de la AFA, Mario Schmoisman, a pedido de La Voz del Interior, clarificó de qué se trata una impugnación que solicitaron ambos clubes al voto de Talleres y Belgrano durante la última reunión de la divisional. "En abstracto, el pedido que todavía no nos llegó, pero que usted me adelanta, sería incorrecto. Los únicos autorizados a votar son los integrantes de un órgano fiduciario...", como, en efecto, sucedió la noche del martes.
Y es que anteayer, cuando se votó un intento para reformar el torneo, no prosperó porque hubo seis clubes en contra, entre ellos, Talleres y Belgrano (se debe contar con las tres cuartas partes a favor de un proyecto). En consecuencia, Merelas y Lemme le hicieron llegar a Julio Grondona un pedido de impugnación para los sufragios de las dos instituciones cordobesas, basándose en que fueron realizados por José Rufeil y Mario Sarrá, dos miembros de los órganos fiduciarios.
El desconocimiento a las normas con que se rige la AFA por parte de Merelas y Lemme resulta más que evidente y, a esta altura, sólo cabe interpretarlo como una chicana política. Además, es muy complicado que lleguen a las 15 voluntades necesarias para evitar los descensos (ese es el principal objetivo que persiguen) cuando no votaron Unión y la CAI, que se pronunciarían en contra de los cambios y ya hubo seis votos desfavorables a la reestructuración.
Buenos Aires. Es difícil determinar si existen razones políticas subalternas, pero el proyecto fogoneado por un par de presidentes (Enrique Merelas, de El Porvenir, y José Lemme, de Defensa y Justicia), para modificar la estructura de la B Nacional, va camino al fracaso. Al menos, por la vía que ambos plantean.
El asesor letrado de la AFA, Mario Schmoisman, a pedido de La Voz del Interior, clarificó de qué se trata una impugnación que solicitaron ambos clubes al voto de Talleres y Belgrano durante la última reunión de la divisional. "En abstracto, el pedido que todavía no nos llegó, pero que usted me adelanta, sería incorrecto. Los únicos autorizados a votar son los integrantes de un órgano fiduciario...", como, en efecto, sucedió la noche del martes.
Y es que anteayer, cuando se votó un intento para reformar el torneo, no prosperó porque hubo seis clubes en contra, entre ellos, Talleres y Belgrano (se debe contar con las tres cuartas partes a favor de un proyecto). En consecuencia, Merelas y Lemme le hicieron llegar a Julio Grondona un pedido de impugnación para los sufragios de las dos instituciones cordobesas, basándose en que fueron realizados por José Rufeil y Mario Sarrá, dos miembros de los órganos fiduciarios.
El desconocimiento a las normas con que se rige la AFA por parte de Merelas y Lemme resulta más que evidente y, a esta altura, sólo cabe interpretarlo como una chicana política. Además, es muy complicado que lleguen a las 15 voluntades necesarias para evitar los descensos (ese es el principal objetivo que persiguen) cuando no votaron Unión y la CAI, que se pronunciarían en contra de los cambios y ya hubo seis votos desfavorables a la reestructuración.