Darío Zárate cree que para ascender, Talleres no debe desperdiciar puntos ante equipos que no son candidatos, como Ferro.
La sensación que le quedó a los jugadores de Talleres después del empate ante Ferro fue que en lugar de sumar un punto por el resultado final se terminaron desperdiciando dos. Además, es el segundo partido consecutivo en condición de visitante que cuando se pone en ventaja no puede mantener el resultado y termina igualando. Todavía con bronca por la oportunidad desaprovechada de subirse al primer lugar de la tabla (ayer perdió San Martín de San Juan), el volante Darío Zárate se refirió a la situación explicando: «Si queremos salir campeones y subir a Primera División no podemos darnos estos lujos de empatar con equipos que no son candidatos. Dejamos pasar varios puntos que nos dejarían en el primer lugar, así que a Godoy Cruz le tenemos que ganar como sea», exclamó el «Loqui».
-Con la mente en frío, ¿sirve el punto?
-No, para nada. Durante el desarrollo del juego fue Talleres el que salió a buscar el resultado, fuimos protagonistas y creamos muchas situaciones para irnos con una ventaja mayor en el primer tiempo. Además, después del empate Ferro casi no atacó, por eso tengo mucha bronca porque perdimos dos puntos.
-¿Por qué a Talleres le cuesta mantener la ventaja?
-Son detalles que tenemos que mejorar con urgencia si queremos pelear el campeonato. Tenemos que aprender a cerrar los resultados, porque sino terminamos padeciendo. Pensar que ahora seríamos los punteros... Pero lo más preocupante me parece es que nos empataron de la misma manera las dos veces (Defensa y Justicia y Ferro): íbamos ganando el primer tiempo y nos empataron después con un penal.
-¿A qué le atribuís esa responsabilidad?
-A las desconcentraciones que tenemos en algunos pasajes, aunque parece que cada vez que nos equivocamos nos facturan.
-Ahora tendrán una rápida revancha el jueves.
-Sí, ya estamos pensando en cómo ganarles. No será fácil, por algo salieron campeones el torneo pasado.

De atacar a contener
Zárate, por lo general siempre se destacó por ser un volante ofensivo con llegada al área rival. Pero el técnico Roberto Saporiti lo utilizó en todos los frentes del mediocampo, ya sea con línea de tres o cuatro, y su función se limitó más en la contención que en ofensiva. «Uno siempre tiene que responder a lo que pide el entrenador. Es verdad que por lo general me gusta irme al ataque, pero me siento cómodo en esa tarea. En el plantel tenemos los carrileros con mucha vocación ofensiva, como lo son Cabrera (Martín) y Lázaro (Ezequiel), por lo que en general tengo que poner el equilibrio para hacer los relevos», dijo.