Huracán de Tres Arroyos se fue envuelto en una crisis de nervios. Toda la delegación entendió que el 1-0 parcial mutó en un 1-3 por obra y gracia del juez Darío Maccarone. Después del gol de Ruiz Díaz, sufrieron las expulsiones de "Leo" Natalicchio y Mariano Martínez, y un polémico penal, la jugada clave.
Pero lo que los sacó de quicio fueron supuestas agresiones verbales del juez, quien, tras el 3-1, le mostró la roja a Blanco y a "Maxi" Natalicchio. Estos últimos, con los nervios de punta, debieron ser contenidos por tres policías. "Maccarone cagón, salí... que te estamos esperando", decían los jugadores, casi en la puerta del vestuario del juez. Ni siquiera la intervención de Darío Zárate, volante albiazul, los tranquilizó.
Y la bronca quedó registrada en los grabadores. "Maccarone nos dijo: 'Talleres tiene que ganar', y por eso la impotencia. El juez dirigió un partido arreglado", dijo Blanco. "Todos saben que el juez estaba arreglado. Me hago cargo de lo que digo. Fue un robo. Es el peor árbitro. Se va tranquilo... por ahí lo hace con un 0 kilómetro. No sé si estaba apretado, amenazado o había plata de por medio. Jugamos contra 12", agregó el defensor. "Quiero largar el fútbol, me siento robado", agregó "Maxi" Natalicchio. Y cerró el dirigente Armando Parodi: "Talleres no necesita un árbitro que lo ayude tanto".
Maccarone. No habló de su actuación, sólo comentó que no iba a informar a los jugadores de Huracán, pese a los insultos.