Los cincos clubes más grandes pretender armar un torneo para mejorar sus ingresos por publicidad y televisión. ¿Qué hay detrás del proyecto? Lo contó La Gaceta.

1. ¿Quién será el presidente?

Con las figura de Marcelo Tinelli y Luis Segura cada vez más borrosas, "Chiqui" Tapia tomó la delantera y ya contaría con el apoyo de los asambleístas del interior del país. Con ese panorama, el actual presidente de Barracas Central deberá cumplir su promesa de campaña y federalizar los torneos y, sobre todo, los ingresos por televisión.

2. Los grandes se irían

Ante la amenaza de que Tapia sea el heredero de Grondona, los presidentes de River, Boca, San Lorenzo, Racing apuntalarían una lista de unidad, que estaría encabezada por Nicolás Russo, representante de Lanús. Todos, afines al macrismo, tendrían el apoyo del Gobierno nacional para discutir la creación de una nueva Súper Liga.

3. Copiar los modelos europeos

Emularía los modelos empleados en Europa, donde la Liga de España, la Liga Premier y la Bundesliga son controladas por los clubes. Esto les daría la posibilidad de discutir nuevos contratos por la televisación de los partidos y evitar así repartir los ingresos con las demás instituciones.

4. La separación

En caso de conformarse la Súper Liga, los clubes deberán conseguir separarse de la AFA, a la que le quedarían para explotar los torneos de ascenso y la Selección.

5. Etapa de gestación

Aunque el proyecto aún está en una etapa de gestación, se rumorea que no contaría con más de 20 equipos y que se elegiría a los clubes que mejor miden en el rating.

6. Los cordobeses estarían adentro

Tendrían aseguradas sus plazas los cordobeses (Belgrano y Talleres), los rosarinos (Newell's y Central) y los de la capital santafesina (Unión y Colón).

7. Las elecciones, la clave

Las elecciones del 30 de junio definirán no sólo al nuevo presidente de la AFA sino también los destinos del fútbol en el país. Con el certificado de defunción firmado para el Fútbol Para Todos, los clubes -como siempre- con las cuentas en rojo y sin Grondona, nuevos actores tomarán las riendas del deporte más popular y la amenaza más firme es que sea para pocos.