El correntino no sabe si será operado de la lesión en el hombro. Esperan por más estudios.

La historia médica de Aldo Araujo en Talleres acumula varias lesiones. Y esta vez, su molestia podría ser tratada en un quirófano. Es que, al igual que le ocurrió ante Instituto en el amistoso de verano, el pasado lunes en San Luis el hombro izquierdo le terminó jugando una mala pasada a “Turbina”.

Ayer, y luego de varias consultas médicas entre Julio Ferreyra, responsable del departamento médico de Talleres, y especialistas de traumatología del Hospital Privado (institución con el que el club tiene un acuerdo para tratamientos médicos de alta complejidad), se decidió continuar con los análisis y la observación.

En la primera lesión del correntino, el cuerpo médico y la dirigencia de Talleres habían decidido no operar a Araujo. El presidente albiazul, Andrés Fassi, había pedido que intentaran recuperarlo con rehabilitación y un tratamiento conservador intenso, pero la decisión no dio el resultado esperado.

“La verdad que no me esperaba esto otra vez. Ya está, ahora hay que seguir adelante”, le dijo el correntino a Mundo D al salir ayer de la Boutique con su hombro inmovilizado.