Con el tanto de ayer, Klusener marcó en todos los clásicos ante los equipos cordobeses. Ya lo habían sufrido Racing e Instituto. “Lo ganamos por contundencia”, expresó.

Con 25 goles en 28 partidos, Gonzalo Klusener cuenta con pergaminos de sobra para causar miedo en cualquier área. Y fiel a su instinto, el destino lo dejó mano a mano con la victoria de Talleres, nada menos que antes el rival que le faltaba. Por tratarse de Belgrano, el ingrediente extra sin duda se disfruta más. De esta forma, el ex delantero de Estudiantes, Brown de Madryn entre otros equipos, completó la faena con todos los equipos cordobeses. No le quedó ningún clásico rival por lastimar. “A Belgrano le había convertido con la camiseta de Ben Hur de Rafaela, pero este, por ser el primero con Talleres, tiene un condimento especial, porque la gente está contenta y podemos celebrar con todo lo que eso significa”, rescata Klusener, que le metió tres goles a Racing por el Argentino A, y dos a Instituto por el torneo de Verano pasado. De yapa, tanto Sportivo Belgrano (2) como Alumni de Villa María (3) lo sufrieron también.

“Nosotros queríamos ganar sí o sí, no importa si es amistoso, los clásicos no se especulan”, siguió diciendo Klusener. “Lo ganamos por contundencia, nos mentalizamos de esa manera. Ellos tuvieron chances pero nosotros aprovechamos lo que generamos. Quizá son se vio el mejor partido de fútbol, a los dos equipos les falta ritmo. En lo físico no quería arriesgar mucho, pero dentro de la cancha, no te duele más nada y te olvidás de todos los dolores para poder ganar”, contó. Con relación al juego, se explayó: “Encontramos el gol en el momento justo, y lógicamente, nos hicimos un poco atrás. Ellos se vinieron con todo y hasta tuvimos suerte con esa última jugada del final, donde la salvamos en la línea. Fue un partido lindo y vibrante, por suerte ganó Talleres.

Sobre los momentos friccionados, destacó: “El partido fue trabado y luchado. Por momentos tuve que lidiar mucho con Lucas Aveldaño y Sergio Rodríguez, más algunas discusiones con Juan Carlos Olave pero bueno, eso queda todo ahí, es un clásico y está permitido”.

Xenofobia. Klusener a su vez, abordó el tema de los cantos racistas para Belgrano. “No lo comparto. También es parte de un folklore y pasa en todas las canchas, no lo quiero justificar pero no siempre eso significa que se desprecie a la gente de Bolivia y Paraguay. Tengo amigos paraguayos, es una cargada y estoy de acuerdo con que no debería cantarse en ninguna cancha. A veces se canta sin mala fe”.

Más de dos millones de pesos. Belgrano y Talleres ganaron en las tribunas, en épocas donde los clubes están a pleno con la campaña de socios para sus respectivos torneos. No hubo detenidos porque no hubo problemas, sólo el reiterado canto xenófobo de algunos hinchas albiazules que casi obliga a Juan Pablo Pompei a parar el partido; y la contestación celeste de una bandera que hacía mención a la ONG de La Fiel. El clásico dejó 2.058.990 pesos de recaudación con 28.107 entradas vendidas. Talleres recaudó 1.035.880 con 14.190 localidades expendidas; mientras que Belgrano recaudó 1.023.110 a través de 13.917 boletos vendidos.