“Todavía tengo una espina clavada en Talleres”, dijo el delantero, que terminó su préstamo en Chile.

Además de Sebastián Navarro y Guillermo Cosaro, a Talleres debe regresar Luis Ángel Salmerón, que aún tiene dos años de contrato en la “T” y que terminó su préstamo en Wanderers de Chile. “Se tiene que presentar a entrenar el 2 de julio”, confirmó Rodrigo Escribano, presidente del fondo de inversión.

Y desde Buenos Aires, donde pasa sus vacaciones, “el Pupi” dijo que le gustaría tener una revancha en la “T”, aunque debe contar con el visto bueno del DT Arnaldo Sialle.

Salmerón sabe que le puede jugar en contra no haber jugado el Argentino A. “Sé que puedo ser maltratado por alguien que piense que me cagué en Talleres, pero no fue así. Yo pensé en el futuro de mi familia y me fui a Banfield, con el que fui campeón de Primera. Y obvio que me gustaría tener revancha y para mí sería un desahogo muy grande ascender porque me sacaría esa espina”, afirmó el centrodelantero de 31 años.

“Si me toca quedarme en Talleres, lo haré de buena manera; y si me tengo que ir, lo tendré que aceptar”, agregó.

Consultado sobre si aceptaría arrancar detrás de Klusener, dijo: “Soy hincha de Talleres y Klusener es mi ídolo, hizo mil goles y lo devolvió a la B Nacional. Lloré cuando ascendió”.