El DT José María Bianco probará al ex Alumni que se ha recuperado de un desgarro. Si está bien, va por el suspendido Ledesma.

El 3-2 ante Racing de Nueva Italia no fue lo único que aclaró un poco el panorama en Talleres. También lo hizo la recuperación de algunos lesionados, por caso la de Román Strada.

El ex Alumni de Villa María se ha recuperado de un desgarro que sufrió ante la Academia por Copa Argentina, hace poco más de 20 días y podría ser tendido en cuenta ante Central Córdoba de Santiago del Estero, el próximo viernes a las 22.

El volante faltó de los partidos del Argentino A ante Unión de Sunchales, Alumni, Gimnasia y Tiro y el del miércoles pasado frente a Racing.“Tiene el alta. Habrá que ver la cuestión física y futbolística”, comentó Julio Ferreyra, el médico de Talleres. “Ya estoy a disposición de Bianco”, dijo el propio Strada.

El volante sería probado entre hoy y mañana para saber si puede ser de la partida. Si lo hace, ocuparía la banda izquierda, mientras que Guillermo Cosaro bajaría a la defensa para relevar al suspendido Walter Ledesma, quien deberá purgar una fecha de suspensión, por haber llegado a las cinco tarjetas amarillas.

Hasta ahora sería solamente un cambio el que realizaría Bianco, aunque seguramente, probará algunas alternativas como modificaciones de sistemas, entre otras variantes.

Otros lesionados que se están recuperando son Luciano Precone, Emiliano Pérez y Gabriel Carabajal. El defensor sufrió un retraso en la recuperación de su lumbalgia, la semana pasada, cuando ya estaba a punto de tener el alta. En cuanto a Pérez, se recupera de un desgarro, al igual que Carabajal. El ex Sportivo Belgrano podría jugar ante Juventud Antoniana de Salta. Carabajal debería esperar 15 días más.

Sigue la veda de visitantes. Se mantendrá la veda para hinchas visitantes para los partidos entre Central Córdoba y Talleres.

El viernes será local el equipo santiagueño que había decidido levantar la restricción para simpatizantes albiazules, a partir del ok de la policía local.

Talleres pidió al Cosedepro y a la Liga que hagan conocer al Consejo Federal su voluntad de que persista la veda para evitar líos como aquel del 14 de febrero de 2010, en el que sus hinchas fueron maltratados por barras locales y la policía, antes, durante y después del juego como venganza por robar una bandera en el partido de ida en el Chateau.

Ante la oposición cordobesa, Central Córdoba desistió.