Socios tomaron la sede de Talleres, pidiendo explicaciones por el futuro. Buscaban a Ahumada. Valencia y Saporiti dialogaron con ellos, y les pidieron paciencia.

El ambiente en Talleres, además de tener incertidumbres en el horizonte, cada vez acrecienta más la ansiedad del hincha. Ante la necesidad de respuestas, un grupo de casi 50 socios se autocongregaron en la sede del club, y la tomaron, de manera pacífica. Al final, no hubo incidentes que lamentar, ante la intervención del vicepresidente de Ateliers, Daniel Valencia, y el técnico Roberto Saporiti. Pero la imagen del gerenciador Carlos Ahumada es cada vez más cuestionada, al punto que algunos presentes hasta pidieron su renuncia.

Cerca de las 17.30, aparecieron las mismas caras que el martes por la noche se manifestaron enfrente a un centro comercial céntrico. Y volvieron a aclarar que no forman parte de ninguna agrupación política.

Fue Gustavo Gómez, adherente 19359/6, quien habló en representación del grupo espontáneo: “Ingresamos sin hacer violencia, y hablamos en buenos términos con Valencia. Le pedimos explicaciones. No hay refuerzos, no hay jugadores, los juveniles se van a otros clubes... Talleres está acéfalo. Estamos hartos. Esto no da para más”. En tanto, el socio Gustavo Sanz comentó: “No somos barras, somos hinchas que queremos saber qué pasa en el club. Le queremos decir a Ahumada que Talleres no se maneja por teléfono. Y si no quiere conducir la entidad, que se vaya entonces”. De fondo, se escuchaban cánticos de los hinchas. Valencia no brindó más precisiones, y citó a 15 personas del grupo para el martes a las 11, a los fines de reunirse con Ahumada.

Después apareció en escena Saporiti, y la mayoría de los hinchas recobró la calma. Otros aumentaron su preocupación. Pero la realidad indica que a un mes del inicio del torneo Argentino “A”, en Talleres hay 12 jugadores entrenando. Uno menos que el martes, ya que el juvenil Sebastián Taborda no se presentó ayer, por cuestiones personales, y por más que diga que prioriza Talleres, en este clima cualquier cuestión dispara interrogantes. Así está la situación en el albiazul. ¿Y Ahumada? Sigue ausente...

Saporiti, en llamas. No lo va a reconocer públicamente. Y lo sabe disimular bastante bien. Pero en realidad, es inocultable el fastidio que tiene el DT Roberto Saporiti por el presente de Talleres. No le hace ninguna gracia que dieran inicio los entrenamientos, con apenas 13 juveniles. Y que la llegada de refuerzos se dilate cada vez más. A un mes del arranque del Argentino A, el albiazul es el único equipo que no está conformado. Y ese estancamiento puede serle contraproducente. “Reconocemos que estamos en desventaja”, dijo el “Sapo” en la primera práctica. Ayer dialogó con los hinchas, les intentó transmitir tranquilidad, y volvió a defender al gerenciador Carlos Ahumada. Y se escuchó por lo bajo: “A mí nadie me hace el equipo, no lo permitiría. Si fuera otro equipo, hace mucho que me hubiera ido, pero confío en Ahumada, y quiero al club”.

Daniel Valencia volvió a reiterar que en unos días habrá novedades. Pero el malestar es creciente. Ya se perdió la paciencia, por más que quieran maquillarla.