Talleres celebra hoy un nuevo aniversario de su fundación.

Lejos está de sus mejores años y tampoco pudo escapar al pobre presente del fútbol cordobés, sin representantes en la Primera División de la Asociación del Fútbol Argentino. Hasta podría decirse que está en deuda con su historia, generosa en capítulos plagados de proezas. Pero al menos esta vez, los hinchas de Talleres tienen un buen motivo para festejar.

Los albiazules cumplen hoy 95 años y entran a la recta final del centenario con la ilusión de recuperar el protagonismo perdido.

La pasión que llegó en tren. Heredero del Defensa Infantil –un equipo que jugó hasta 1913, cuando fue suspendido por la Liga Cordobesa a raíz de bochornosos incidentes tras perder una final– Talleres nació el 12 de octubre de 1913 como consecuencia de las incontenibles ganas de jugar de aquellos juveniles sancionados.

Así fue como, con un recurso jurídico, los mismos futbolistas consiguieron el aval de la gerencia del Ferrocarril Central Córdoba, en la cual trabajaban varios de ellos, y dieron forma a un nuevo club al que llamaron Atlético Talleres Central Córdoba. El “ardid” les permitió retornar a las competencias oficiales a partir de la temporada de 1914.

Presidida por Don Tomás Lawson –un inglés que llegó a actuar en la liga de su país– la nueva entidad se encontró sin la solvencia económica deseada, pero muy pronto recibió el respaldo de la empresa del tren, lo que le permitió salvar los primeros años de su existencia.

Pocos días después de su fundación, comenzó a disputar partidos informales en un terreno cedido por la familia Salvatelli en la intersección de las calles Cochabamba y Avenida Patria, del barrio Inglés (hoy Pueyrredón) y en 1914 se inscribió para jugar en la Liga.

Rápidamente se convirtió en referente de los torneos locales y en 1939 intentó infructuosamente llegar a un acuerdo para jugar en AFA junto a Belgrano. Su pretensión de extender sus fronteras debió esperar hasta 1969, cuando disputó su primer torneo Nacional. Después de ser animador principalísimo de los torneos de los ‘70, su protagonismo cedió notablemente en la segunda mitad de los ‘80.

Ahora, con la proximidad del centenario que celebrará en 2013, el club de barrio Jardín pretende comenzar a edificar la base de un Talleres más acorde a su historia.