Proyecto. Propone una Liga Profesional, la llegada de inversión privada a los clubes y responsabilidad patrimonial de los dirigentes. Los 10 puntos destacados del club para profesionalizar el fútbol argentino.

“En la AFA no se habla de proyectos y sí de personas. Nadie dice hacia dónde vamos”. La frase, repetida por Andrés Fassi cuando se lo consulta sobre la AFA, se plasmó ayer en un proyecto en el que el presidente de Talleres y la directiva del club explican el modelo de gestión que impulsan para la entidad que rige el fútbol argentino.

Son 27 puntos, en los que se pronuncian por la creación de una “liga profesional”, “la apertura a la inversión privada”, la sustentabilidad y la responsabilidad patrimonial dirigencial durante sus mandatos.

1. Creación de una Liga Profesional semejante a las de México y España, que estará a cargo de la organización de los torneos de Primera y Segunda División. Deberá ser independiente de la estructura de AFA y mantendrá la organización de los torneos de ascenso, del interior y selecciones nacionales.

2. Los primeros torneos deben ser organizados por el sistema de liguillas (Playoffs), que aseguran una mejor comercialización de los derechos de televisación y de los partidos, para generar en este primer período de dificultad económica fuentes de nuevos ingresos mayores a los actuales.

3. Plan de distribución de ingresos equilibrado que proteja la competencia y valore situaciones financieras, societarias y de capacidad de los clubes: 33.33 % por rating en el país/cantidad de socios, 33.33 % en partes iguales para los equipos y 33.33 % por el éxito deportivo de los últimos tres años.

4. El Tribunal de Penas debe independizarse de la Liga Profesional y quizás de la AFA. Estará integrado por personas idóneas e irreprochables en su conducta y de carácter profesional. Ninguna institución de la Liga Profesional puede tener injerencia en las designaciones del Tribunal.

5. La designación de los árbitros de la Liga Profesional debe encontrarse desligada de la organización central, acreditando independencia y transparencia. Debe ser un órgano profesional de jerarquía, con exigencia deportiva de primer nivel y parámetros de calidad mensurables.

6. Promueve la creación de un estatuto de la Liga Profesional. Los cambios hacen hincapié en la transparencia de los dirigentes y sus capitales, enfatizando la responsabilidad patrimonial de los dirigente durante sus mandatos, la federalización y la periodicidad de los mandatos de las autoridades.

7. Apertura a la posibilidad de inversión privada en los clubes, reorganización del régimen de Ligas de Fútbol del interior, profesionalización de la dirigencia de las instituciones deportivas que compitan en la Liga Profesional, licitación de las actividades comerciales.

8. Creación de un plan de desendeudamiento de los clubes y elaboración de la legislación pertinente; plan de financiación estatal de los clubes profesionales; libre voluntad de los clubes para decidir la figura jurídica que los conduzca.

9. Programas de formación dirigencial obligatorios para las autoridades de los clubes; programas de sustentabilidad y equilibrio económico y financiero para evitar que los clubes gasten más de los recursos que generan.

10. Trabajo conjunto con el Estado y las fuerzas de seguridad en la creación de un proyecto definitivo para erradicar la violencia en el fútbol; sanciones efectivas y gravosas a las instituciones y personas que no combatan la violencia.