Desde mañana al 15 de diciembre el juez de la quiebra de Talleres, Saúl Silvestre, dispondrá de una moratoria para aquellos socios activos que figuran en el padrón en condiciones de votar, en función de recuperar a la totalidad de los inscriptos. La apertura de ese padrón fue hace un año, y hay más de cinco mil inscriptos, aunque poco más de 2.500 se encuentran al día y en condiciones de sufragar, de acuerdo a lo que dice el estatuto.

Entonces, la intención es nuevamente contar con todos los aportes de los adherentes que aún figura en mora y de paso, continuar con la recaudación, cuyo destino será colaborar con la quiebra y con los siguientes proyectos de distribución para los acreedores. La moratoria durará un mes, hasta el 15 de diciembre.