El entrenador Arnaldo Sialle rescató a Navarro y puso tres delanteros. La “T” ganaba 1-0, aunque no lo pudo sostener. Cortó la mala racha, pero quedó en zona “roja”.

La tranquilidad de Arnaldo Sialle antes del juego, en el búnker albiazul se replicó al final del domingo, cuando Talleres ya había igualando 1-1 ante Boca Unidos. La cara era la misma, el tono de voz era idéntico, pero la situación era otra. El conjunto cordobés ya había cortado la mala racha con la que había llegado a Corrientes, sus variantes le habían dado algo de juego, pero el resultado terminó en un 1-1 cuando podría haber sido una victoria. “No me voy conforme. Tendríamos que haber ganado”, dijo “Cacho”, al fi na l de la jornada.

El DT concretó modificaciones que resultaron clave en el desarrollo del partido y apuntaló así un rendimiento, que si bien no terminó de convencer, fue suficiente como para dejar de lado las sucesivas pálidas a nte I nstituto, Pat ronato y Brown de Adrogué.

Es que, más allá de las declaraciones de Rodrigo Escribano en la previa cuando deslizó que sería ilógico poner en la misma balanza tres partidos y toda una campaña que terminó con el tan ansiado ascenso, lo cierto es que en el cielo del Mundo Talleres ya se vislumbraban algunos nubarrones.

El regreso de Renzo Vera, y las inclusiones de Sebastián Navarro (no era titular desde la cuarta fecha ante Crucero del Norte) y Gastón Bottino (no jugaba hace cuatro partidos) más la confianza para Juan Manuel Tevez, confirmadas horas antes del juego, le dieron buenos dividendos al equipo cordobés, que hasta pudo traerse una victoria, aun sin un rendimiento superlativo.

“Estoy tranquilo. Siempre estoy tranquilo”, había dicho el entrenador en la previa, cuando el plantel se disponía a partir rumbo al estadio de Huracán, donde Boca hace de local.

Con la misma calma, al final del día, destacó el desempeño de sus dirigidos. “Le metieron, el equipo le metió. De a ratos jugó, creamos situaciones. Nos anularon un gol bien hecho por Sánchez Sotelo, p ero no creo que el juez haya jugado mal porque se lo marcó el asistente”, apuntó el técnico, quien a la vez reconoció que “no tuvimos un buen arranque, pero nos fuimos acomodando”. Talleres hizo lo más difícil y luego falló en lo más fácil. Se puso 1- 0 cuando el rival lo atropellaba y no supo mantenerlo. Sánchez Sotelo tuvo dos chances y Navarro, la más clara. Su tiro dio en travesaño y palo, y luego, se equivocó en una salida; le robó Guillermo Israelevich y la clavó a un ángulo.

“Hay cosas que mejora r, siempre hay cosas que mejorar, ya lo vamos a hablar con los muchachos. ¿Si hay Sialle para rato? Sigo trabajando. Hoy ( por ayer) me voy más o menos”, concluyó el DT, quien no habla del futuro a largo plazo, sino que trata de ir partido a partido, algo que será clave para afirmar al equipo en la categoría.

Por lo pronto, el plan de Sialle le aportó algo de fútbol al equipo, pero necesita más. Los números ya comenzaron a apretarlo porque ya que está en zona de descenso.