La T tuvo dos penales: uno lo convirtió Klusener y el otro lo falló Velasco. La visita terminó con 9 jugadores. El Kempes estuvo a full, con unas 40 mil personas.

En un Kempes a full (con unas 40 mil personas) Talleres le ganó 1 a 0 a Gimnasia y Tiro de Salta, por la séptima fecha el Undecagonal 2013 del Argentino A, y sigue como único líder del Reducido (con 19 puntos).

La T tuvo este lunes, como en los últimos cuatro partidos, penales a su favor. Ambas jugadas fueron faltas (bien por el árbitro) aunque el Matador convirtió el primero pero falló el segundo.

Con este resultado, le sacó 5 puntos a Maipú y sigue a seis de Santamarina, que este lunes venció a Juventud Unida.

En el partido, el primer gol llegó rápido: a los 2m del primer tiempo, por un penal de Federico Rodríguez (la bajó con la mano ante un tiro de Gastón Bottino y fue expulsado) que Gonzalo Klusener cambió por gol.

El encuentro, de ahí en más, fue todo de la T. El equipo de Sialle controló el balón y jugó con la desesperación del rival, sobre todo por la superioridad numérica.

Así planteado, a los 39m, Osvaldo Young se fue expulsado por doble amarilla (primero había golpeado a Agustín Díaz y luego, cometió una fuerte falta sobre Klusener) y la visita se quedó con nueve jugadores.

Minutos después llegó la mala para Talleres: Jesús Nievas recibió la quinta amarilla y no podrá jugar en la próxima fecha.

En el segundo tiempo, el equipo salteño salió con todo, jugado por jugado, a buscar el empate. Tuvo una situación clara apenas comenzó (Aguiar le tapó el remate a Agudiak) pero no mucho más.

Luego, la T reaccionó, salió del letargo y comenzó a cargar contra el arco de Mulieri, que a esa altura ya era figura.Después de una buena jugada colectiva, llegó el segundo penal (con falta a Nelson Benítez). Klusener le cedió el tiro a Velasquez, pero Maxi falló (tapó el arquero) y Bottino no pudo definir con el rebote en sus pies.

Talleres sufrió por momentos, porque no había podido liquidarlo y porque sabía de la importancia del triunfo. Pero supo controlar el cierre, sin desesperarse y se llevó otros tres puntos fundamentales.