Talleres. El capitán ratifica los dichos: “Quizá me equivoqué en una palabra pero no en el concepto”. Sialle le pidió cuidado. ¿Malestar interno?

Lleva dos noches sin dormir. Es plena madrugada y en la tele no pasan nada. O sí. El compacto del partido Talleres-Gimnasia y Tiro con un sócalo donde se lee: La T cayó 4-2 ante el Albo salteño. Esos números le quitan el sueño al toque. Da vueltas en la cama pero no hay caso. A Juan Pablo Rezzónico le dura la amargura por la derrota.

No fue una noche más para el defensor albiazul. Tras la caída en la reanudación del Argentino A, de su boca salieron expresiones resonantes: “Damos asco, no tenemos huevo”, escupió ante los micrófonos de Radio Sucesos. Ahí nomás, esos adjetivos se filtraron en las redacciones de los diarios. En la hinchada. En el grupo de jugadores. Por eso, hablar el día después de lo dicho, en frío, deja otras en claro, ¿al descubierto?

“Estaba recaliente y lo dije. Igual, lo ratifico: al equipo le falta determinación para ir al frente. En las prácticas, jugamos de una forma y después no podemos volcarlo en los partidos. Pero no le veo nada de malo a lo que dije. Además, soy uno de los principales responsables en transmitir ganas, personalidad y huevo; entonces la primera autocrítica es para mí”, reflexionó el ex Racing en un diálogo a fondo con Día a Día.

–¿Entonces ratificás tus dichos? Digo, fueron palabras no habituales en público...
–El que me conoce sabe como soy. Fue una autocrítica. Yo no entiendo cuál es el problema o que digan ‘uy, mirá lo que declaró’. No veo lo malo. Me rompo todos los días para aportarle al equipo y son cosas que hemos hablado un montón de veces. Le puedo haber errado a la palabra, ahora, si querés ser susceptible, sé susceptible y te vas a embolar Si vos me decís no tenés huevo o no tenés determinación, me estás diciendo lo mismo”.

Ahora, más calmo, Rezzónico profundiza el concepto. “El primer responsable soy yo porque si el equipo no trasmite, será que uno no está contagiando. Pero acá, los principales responsables de que el equipo no tenga huevos somos todos”. Y agregó: “Está claro que no lo estamos consiguiendo”.

Ayer, en el regreso a las prácticas, los ojos estuvieron puestos en el defensor. De hecho, mantuvo un diálogo mano a mano con el DT Arnaldo Sialle. Sí, aparte de la charla que tuvieron el técnico y los jugadores por más de media hora. Sobre el cónclave, Rezzónico contó: “Me dijo que no era el momento de hablar apenas salí de la cancha. Que midiera la calentura. Pero está todo bien con él. Insisto, quizá le erré a la palabra pero no al concepto”, reafirmó el hombre que volvió a la titularidad (con capitanía elegida por Sialle) después de una recuperarse de una rotura de ligamentos cruzados en una rodilla.

La presión paraliza. Hoy Talleres ocupa la 11ª posición en la Zona Norte del Argentino A. El equipo no encuentra una identidad futbolística y los resultados le dan la espalda. Acaso el contexto que rodea al club esté jugando en contra de los futbolistas. Lejos de esquivarle al tema, Rezzónico tiene algo para decir.

“Hay una sensación de equipo que no podemos cambiar. No reaccionamos ante cualquier adversidad y eso es lo más triste y duele. No es fácil encontrar la solución a los estados de ánimo de un grupo pero no sé si pasa por la camiseta”, analizó Juampa.

–¿La camiseta pesa igual para todos?
–A algunos les pesará para bien, a otros para mal. No encuentro bien la definición al porqué. Capaz porque nos vemos obligados a sacar puntos que antes no pudimos y todo se va complicando. Pero la falta de identidad no la conseguimos desde que estaba Oscar Bianco.

Igualmente, Rezzónico trató de dejar claro que la malaria sea por falta de voluntad. Y se refirió al tema: “Jamás vi que nadie no corriera, esto no es por falta de ganas, que quede claro. Ahora, otra cosa es correr y saber hacia dónde, con convicción y otra es correr sin saber adónde”, aclaró todavía con la voz temblorosa de la bronca.

–¿Creés que pueden revertir la historia? ¿Encontrar la personalidad?
–Sí. Sino no estaría acá y me hubiera ido a mi casa. Nos da vergüenza ajena y tenemos la obligación de darlo vuelta.

Calles largas entre ellos. El entrenamiento de ayer no fue uno más en Talleres. Y se notó en los rostros de todos los actores principales. Alcanzaba con verle el semblante a los futbolistas y al DT Arnaldo Sialle. Claro, la derrota caló hondo en el ánimo de la T. Pero parece que no termina ahí.¿Qué ocurre? Las declaraciones de Rezzónico habrían generado malestar en algunos de sus compañeros. De hecho, hubo reuniones entre el plantel y Sialle y se dejaron varios puntos en claro.

Además, Romat (llegó a la quinta amarilla), Pomba, Pereyra, Etulain y Erroz dejarían el primer equipo. Y fue el propio Sialle que al pasar expresó: “Habrá cambios”, en referencia al juego ante Unión, en Sunchales, el domingo a las 18.

Igual, no habrá jugadores separados del plantel, adelantó el gerente deportivo, Maxi Salas.

Custodia. Hoy, cuando la T regrese a las prácticas, se extremarán las medidas de seguridad. No quieren llevarse sorpresas con la presencia de los barras en la Boutique.