Cargó contra la Policía local y contra el presidente de Central Córdoba por el maltrato sufrido por los hinchas de Talleres. Hoy elevaría la denuncia.

El horno no está para bollos en Talleres. La bronca, la impotencia y la imperiosa necesidad de que pronto se haga justicia, son los sentimientos que pintaron lo que fue la jornada de ayer para quienes integran el Mundo Albiazul. Es que para muchos aún es incomprensible el maltrato que recibieron el domingo los hinchas del Matador en Santiago del Estero. Los controles del operativo policial santiagueño superaron con creces el mote de “controles” para tornarse casi en una práctica represiva.

Las fotos de los palazos en las espaldas de algunos hinchas, o el relato del gas pimienta arrojado por los efectivos dentro de un colectivo, más las denuncias por la extracción de objetos personales como celulares, por ejemplo, son pruebas más que evidentes de que la organización planteada por el club Central Córdoba no fue la correcta.

Y, claro, la derrota 2-0 ante el Ferroviario es apenas una anécdota por estas horas. Uno de los tantos malos recuerdos de una tarde-noche espantosa. “Fue un día para el olvido. Por lo que hizo la Policía de Santiago, por no poder hacer nada para parar un poco la mano. Un desastre. No teníamos ninguna seguridad, casi nos rompen los vidrios de la cabina donde estábamos, la gente de ellos le gritaba a los policías que le disparen a los hinchas de Talleres. Fue increíble todo”, le contó ayer a Día a Día Ernesto Salum, quien sigue colaborando con el fideicomiso en la administración del club, aunque desde afuera. “Hubo robos, agresiones de todo tipo y por eso la bronca. ¿Sabés qué me dijo el presidente de ellos (Francisco Pece)? Que no nos quejemos, porque ellos sufrieron lo mismo en Córdoba. Entonces yo le pregunté si esto era un revancha armada y el tipo se dio vuelta y ni me contestó”, añadió.

Pero, para que realmente “esto no quede así”, los pasos a seguir no serán pocos. Ayer, el propio Salum y los fiduciarios Gustavo Eluani y Daniel Ruffener se comunicaron con José Tanus Rufeil, el titular del Cosedepro (Comité de Seguridad Deportiva de la Provincia) para evaluar cuáles son las instancias a tener en cuenta para emitir un descargo. Y ésto fue lo que explicó Rufeil, quien a la vez aseguró que el ente donde trabaja no tenía “jurisdicción” respecto a la organización del partido. “El Cosedepro tiene autoridad en Córdoba, no en Santiago. Nosotros podemos hacer recomendaciones, pero nada más. No tenemos jurisdicción allí. Venimos reclamando la creación de un organismo federal que sirva de agente rector para solucionar estos problemas, pero la nación no nos escucha. Se lo planteamos varias veces ya al Subsecretario de Seguridad de Espectáculos Futbolísticos (Subsef) Pablo Palladino, pero no hay caso”, afirmó Rufeil.

Y agregó: “Lo que tiene que hacer Talleres es elevar una denuncia en Santiago, o ante un organismo federal, reclamando por lo que pasó. Luego, con ese elemento, presentarse ante el Gobierno de Córdoba y solicitar que desde ahí se planteé una queja hacia el gobierno santiagueño. Esos son los pasos. Mañana (por hoy) esperamos que la gente de Talleres nos traiga un escrito para iniciar las acciones”.

Y el presi Pece contestó. Francisco Pece, máxima autoridad de Central Córdoba, también dijo lo suyo ayer ante este medio. “Para mí la organización del partido fue excelente. Yo puedo hablar por lo que pasó dentro de la cancha, no afuera. Y allí todo estuvo controlado. La gente de Talleres exageró. Se enojó porque le sacaron banderas en los controles y eso les pasa a todos. Esto es un juego. El técnico (Rebottaro) nos felicitó irónicamente a los dirigentes. Dijo que hubo manos negras. Que aprendan a perder, a nosotros nos pasó lo mismo en Córdoba y nunca elevamos quejas”, tiró.

¿Qué dijo Alfredo Derito, Secretario del Consejo Federal? “No estoy enterado de lo que pasó en Santiago?”. Sin comentarios... Siguen los palos por lo que pasó el domingo. Y esto recién empieza.