Talleres puntero. Pese a sus tres goles consecutivos, Adrián Aranda no se agranda. “Lo único que nos importa es lograr el ascenso”, dijo el Bati.

Las brasas le dan color a las costillas y al matambre en una vivienda de Carlos Paz. Parece un asado más entre amigos el que se come en horas del mediodía en la Villa Serrana, pero no. Sin llegar a ser un almuerzo de esos que se comparten con Mirta Legrand, el nombre propio de los comensales de este asadito le da un condimento distinto a la carne. Especial. Es que allí se los ve festejar y disfrutar de su día libre a tres jugadores de Talleres que llegaron este verano al club y que pegaron un ondón bárbaro: Lisandro Sacripanti, Maximiliano Blanco y el héroe de los últimos dos partidos: Adrián Aranda.

“La verdad, esto es impagable. Poder compartir un asado con amigos y con la familia es lo mejor que hay”, le cuenta el Bati a Día a Día. Claro, el delantero vivió un día distendido ayer y lo tiene más que merecido. Primero, por haber sido el verdugo del ex puntero Juventud Antoniana de Salta, una semana atrás. Y, segundo, por haber vuelto a mojar el domingo. Así conseguió algo que no había conseguido Talleres desde que está en el Argentino A: ganar fuera de Córdoba.

“Estoy disfrutando muchísimo de este momento. Convertir para que el equipo gane es lo mejor que le puede pasar a un delantero. Uno disfruta al 100 por 100 esto de meter goles, pero la verdad me importa más lo colectivo. Prefiero clasificar y jugar las finales que ser el goleador del equipo”, aseguró Aranda, quien convirtió tres tantos consecutivos y es el máximo anotador albiazul en el Clausura.

Para el ex Defensa y Justicia fue determinante haber metido la primera victoria fuera de la Docta y espera que esa racha no se corte este domingo, cuando, a las 20, el Matador visite a Central Córdoba de Santiago del Estero. “Ya arrancamos y no queremos parar. Cortamos la mala racha fuera de casa y vamos a salir a ganar en Santiago. Para nosotros es clave hacerlo porque le podemos sacar una buena diferencia a los que vienen atrás”, analizó el delantero de este Talleres que lidera la Zona 2 del torneo.

Está con nanas, pero llegaría. La pierna izquierda comenzó a molestarle en el duelo ante el Santo salteño. El Bati se la bancó ese domingo y fue clave para lograr el triunfo, pero el dolor persistió y se agravó un poco frente a la BH en el Parque Ilolay, aunque no le impediría estar presente ante el Ferroviario. “Espero que sea sólo una contractura, pero la verdad es que siento una fatiga grande en la pierna. En Rafaela tuve que pedir el cambio, porque no quería arriesgar. Vamos a ver qué pasa en la semana. Yo quiero jugar y creo que voy a poder estar el domingo”, explicó el oriundo de Pergamino.

Finalmente, el goleador que llegó a la T desde el Deportes Quindío de Colombia, le dedicó un párrafo a la gente, a esa hinchada de Talleres que viene copando cuanto estadio se le pone en frente. “Lo del hincha es inexplicable y admirable. Que hayan ido tantos a alentarnos, con el calor que hacía y con el gasto económico que implica hacer un viaje nos llena de orgullo. Ellos son los primeros en los que pensamos cuando salimos a jugar. Queremos regalarle el ascenso”, cerró Aranda, el hombre que nunca se agranda.

¿Rimoldi? Complicado, no imposible. Se especulaba que la jornada de ayer iba a ser determinante para saber si Lucas Rimoldi volvería a vestir la camiseta de Talleres. Y, pese a que todavía la novela no terminó, sí fueron intensos los movimientos de los integrantes de la Fundación Azul y Blanco para repatriar al volante, que se busca para ocupar el lugar que dejó el lesionado Ignacio Anívole. “Hoy (por ayer) hablé con Rimoldi. Le hicimos una contraoferta que tiene que analizar. Un grupo de socios está dispuesto a pagar el monto de la rescisión de su contrato en Grecia. Todo se definirá en 48 horas”, le explicó Ernesto Salum, hombre fuerte de la Fundación Azul y Blanco, ayer a Día a Día.

“Igualmente esperamos que AFA apruebe la posibilidad de traer un jugador más. Anívole y el doctor Julio Ferreyra ya viajaron y creemos que nos darán 15 días para incorporar un volante”, agregó Salum.

¿Qué dijo Rimoldi? “Tengo contrato hasta junio en mi club (el Panseraikos Serres), pero voy hablar con los dirigentes para ver qué posibilidad de rescindir hay. Es complicado, pero no imposible que vuelva a Talleres”. El ex Instituto es el jugador al que la T apostó el todo por el todo. Las opciones serían Vieytes, Zani, Urresti y Cravero.