Ayer volvió Lussenhoff y se incorporaron Celso Esquivel, Cristian Zermatten y Gastón Stang.

“Paciencia y tranquilidad”. Humberto Grondona, DT de Talleres, no se cansaba de repetir esas palabras. Era como una especie de terapia ante la falta de refuerzos que caracterizaron a los primeros cinco días de la pretemporada en Pilar. Y la mañana de ayer sólo tenía de distinto la aparición de las bellas integrantes de Socias, quienes iban a filmar un capítulo de la exitosa serie porteña en las instalaciones del hotel cinco estrellas que ocupa Talleres.

Sin embargo, el día iba a ser diferente. De verdad. Federico Lussenhoff (clave en el armado del equipo) y “el combo” integrado por el central Gastón Stang, el volante Cristian Zermatten y el lateral Celso Esquivel (el paraguayo de todos los años, aunque ya no esté el gerente deportivo) aparecieron ayer bien temprano, por el lobby del hotel, listos para entrenar.

Y el semblante de la cara de Grondona fue otro. Por más que la iniciativa de contratar a algunos jugadores provenga de la gerenciadora y el DT haya tenido que prestar su consenso. Caso Zermatten. “No sé de dónde salió eso, pero no los pedí y no fueron contactados para saber sus situaciones”, le había dicho al diario Día a Día, horas antes cuando le preguntaron por el ex Chicago y Antonio Barijho.

El ánimo de los futbolistas también cambió. “Estamos cerca de hacer práctica de fútbol. Faltarían dos jugadores para que seamos 22”, ironizó un futbolista albiazul. A propósito, en las próximas horas podrían llegar nuevas incorporaciones. Por parte del cuerpo técnico se iniciaron con contactos con Sebastián Carrizo.

El regreso y los retos. Federico Lussenhoff se había ido a México para solucionar algunos problemas personales. Ya de vuelta en el país, respetó la prioridad que le había dado a Talleres y en pocas horas, dio el sí, tal como había hecho hace seis meses. “No hay que perder tiempo y hay que repuntar en el promedio. El torneo será complicado”, afirmó Lussenhoff.

Gastón Stang manejaba varias ofertas, pero finalmente se inclinó por venir a jugar a Córdoba. “Me gustó más lo de Talleres. Es un buen reto. Soy polifuncional, pero me gusta más jugar al medio”, dijo el ex Tigre.

Cristian Zermatten, señaló: “Sé lo que es pelear por evitar el descenso. Lo hice últimamente en Nueva Chicago. No será fácil y hay que tener la mentalidad de ser protagonista”.

Celso Esquivel, ex San Lorenzo, arregló con la “T”. El paraguayo ya había sido tentado a principios de año, pero lo “bajaron” a último momento.