A Héctor Cuevas no se le dio el gol, pero lo mismo la gente premió su esfuerzo. “Hay pelotas que no quieren entrar pero merecíamos ganar por el gran partido que hicimos”, afirmó.

Corrió cada pelota como si fuera una final, y lo era. Probó de todos lados y el travesaño, el arquero o su propia falta de efectividad le negaron el gol. Sin embargo, la gente lo aprobó con una ovación. Héctor Cuevas fue uno de los referentes del sacrificio de Talleres para conseguir la victoria sobre Tiro Federal y por eso el reconocimiento de los hinchas.

A la salida del vestuario, el atacante albiazul, con rostro que reflejaba el desgaste realizado, evaluó: «Lamentablemente seguimos teniendo el arco cerrado, hay pelotas que no quieren entrar. Gracias a Dios hicimos el gol de la forma menos pensada y nos sacamos una mochila importante».

-A pesar de que tenés el arco cerrado el hincha te ovacionó.
-La gente siempre me respaldó y se brindó conmigo, pero debemos devolverle más alegrías. Tenemos el arco cerrado, pero estamos tranquilos porque hicimos un gran partido y no podemos reprocharnos nada.

-¿Qué sensación tenías cuando estaba por ejecutar el penal Maidana?
-Desesperación. Si no lo pateaba él, lo pateaba yo. Pero estoy muy contento por él, porque se lo merecía. Julián pateó un penal que quemaba. Hay que patear ese tipo de penales, habría que hacerle una estatua. Hizo un partido brillante. Es un referente, la gente lo quiere mucho y nos hace falta. Hay que respetarlo, lo respetan los rivales.

-¿Vas atento a la final del Argentino A?
-Por supuesto. Algo conocemos de los dos equipos.

-Si les toca Racing, es tu ex club...
-Sí, y le di todo cuando jugué ahí. Me fui por la puerta grande y ahora me debo a Talleres.

Julio Buffarini. “No sabíamos cómo iban los otros partidos. Nuestra tarea era preocuparnos por nosotros. Después, cuando ya estaba por terminar y se paró un poco el juego, nos dijeron que había perdido Ben Hur y que debíamos aguantar”.

Valentín Brasca. “Cuando iba a patear el penal Maidana, deseaba que haga el gol y que terminara este sufrimiento porque llegábamos y llegábamos y no convertíamos. Después me acerqué al alambrado para preguntar cómo iban los otros resultados”.

“El árbitro nos condicionó”. El entrenador de Tiro Federal, José María Bianco, estaba muy molesto con el arbitraje de Cristian Faraori: «Nos amenazó desde el inicio, me dijo que me iba a echar y lo hizo. Nos condicionó. Los partidos se ganan en la cancha y acá no fue así. Es el sistema. Yo ya sé cómo es», completó.